Desde pequeños, es importante enseñar a los hijos los modales para convivir en sociedad, como saludar, despedirse, dar las gracias y pedir las cosas diciendo por favor. Sin embargo, hay una gran diferencia entre estos gestos y obligar a los hijos pequeños a excederse en el trato con los demás, como obligarlos a saludar dando un beso y un abrazo, incluso a desconocidos.
¿Por qué no debes obligar a tus hijos a dar muestras de afecto a otros?
En nuestra cultura, es común que las personas saluden de beso por educación. Sin embargo, esto no debería ser un requisito para los niños pequeños, a quienes muchas veces se le obliga a dar besos o abrazos a los demás porque causan ternura.
Obligar a los niños a llevar a cabo este tipo de acciones, por más inofensivo que parezca, tiene un gran trasfondo. La especialista en psicología infantil, Belén del Toro, explicó el motivo por el cual no hay que forzar a los niños.
"Hay que respetar que los niños no quieran dar un beso a alguien, pues es un contacto físico muy íntimo. Es normal que el niño no quiera hacerlo y que esa intimidad solo la quieran tener con sus padres, con sus hermanos o con gente de muchísima confianza".
Por esta razón, te compartimos algunos puntos clave para entender por qué no es una práctica adecuada:
1 Fomentar el respeto por los límites personales
Obligar a los niños a dar besos les envía el mensaje de que su cuerpo no les pertenece completamente. Aunque la intención de los padres o familiares sea buena, esta acción puede contradecir el concepto de que los niños deben aprender a respetar sus propios límites y a comunicar cuándo algo no les resulta cómodo.
2Autonomía emocional
A una edad temprana, los niños están aprendiendo a comprender y regular sus emociones. Obligar a un niño a dar un beso cuando no quiere puede generar sentimientos de incomodidad o incluso de confusión.
3Enseñar consentimiento desde pequeños
El concepto de consentimiento es esencial para que los niños crezcan respetando los límites de los demás y defendiendo los suyos propios. Si un niño aprende que puede decidir cuándo no quiere dar una muestra de afecto, se sentirá más seguro para saber decir "no" en otras situaciones en las que se pueda ver comprometido su bienestar físico o emocional.
4Prevención de situaciones incómodas o inseguras
Aunque un beso en la mejilla de un familiar pueda parecer algo inocente, para un niño puede ser algo incómodo, especialmente si no tiene una relación cercana con esa persona.
5Fortalecer la relación con el niño
Un niño que siente que su voz es escuchada y que tiene el control sobre ciertas situaciones, es más propenso a mostrar cariño de manera genuina, sin sentirse obligado a hacerlo.
¿Qué hacer en su lugar?
- Validar sus emociones: Si un niño no quiere dar un beso, en lugar de obligarlo, se puede decir algo como "está bien si no quieres dar un beso. ¿Te gustaría saludar a esta persona de otra manera?"
- Fomentar formas alternativas de afecto: existen muchas maneras de mostrar cariño que no impliquen besar ni abrazar como sonreír, o incluso decir "buenos días" u "hola".
- Dar el ejemplo: mostrar afecto de una manera respetuosa y permitir que el niño elija cuándo mostrarlo también es una manera de enseñarles a ser amables sin sentirse forzados