“Vivo con miedos, por esta pandemia, me paraliza, me quita la paz interior, me impide orar con fervor. ¿Qué hago?”
La Madre Teresa de Calcuta tiene una frase que lo dice todo:
Es muy conocida aquella anécdota de una persona que se le acercó para pedirle un consejo, vivía temerosa, sin encontrar un propósito en la vida. Ella lo llevó donde los leprosos y le dijo: “Tú dedícate a amar. Dios hará lo demás”.
Sabes que nunca he sido muy bueno dando consejos, pero he visto algunas acciones concretas y sencillas, que están a tu alcance y dan buenos resultados.
Lo primero es renovar tu amistad con Dios, el estado de gracia, y eso lo consigues mediante una buena confesión sacramental.
Lo segundo es olvidarte de ti por un tiempo y empezar a pensar y amar a los demás, como recomendaba la Madre Teresa y hacer las obras de misericordia que estén a tu alcance.
Lo tercero es que empieces a leer la Biblia, y a meditar y reflexionar en sus palabras. Contiene una cantidad extraordinaria de consejos e indicaciones que transformarán tu vida.
Una vez leí que la Biblia nos dice 365 veces ¨No tengas miedo”, una vez para cada día del año.
Si la abres y empiezas a leer encontrarás versículos como estos:
"No temas, pues yo estoy contigo; no mires con desconfianza, pues yo soy tu Dios; yo te he dado fuerzas, he sido tu auxilio, y con mi diestra victoriosa te he sostenido." (Isaías 41, 10)
"Sé muy bien que Dios está conmigo. Mi fe renuevo en las palabras de Dios, tengo fe en la palabra del Señor; confío en Dios y no temo más, ¿qué puede hacerme un hombre?" (Salmo 56)
"Estén siempre alegres en el Señor; se lo repito, estén alegres y den a todos muestras de un espíritu muy abierto. El Señor está cerca. No se inquieten por nada; antes bien, en toda ocasión presenten sus peticiones a Dios y junten la acción de gracias a la súplica. Y la paz de Dios, que es mayor de lo que se puede imaginar, les guardará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús" (Filipenses 4).
Te ayudará leer un fragmento de esta increíble homilía de san Juan Crisóstomo, quien fue acusado injustamente. Dijo estas palabras antes de ser desterrado. Puedes encontrarla completa en Internet.
Te invito a escribirme, cuéntanos tus experiencias con Dios. Te paso mi email personal cv2decastro@hotmail.com
¡Dios te bendiga!