Estas máquinas expendedoras automáticas o también conocidas como “vending machine” fueron creadas para satisfacer la necesidad del hombre de adquirir todo tipo de artículos y alimentos en las mejores condiciones de higiene y calidad a cualquier hora cualquier día de la semana.
Una de las primeras máquinas expendedoras fueron las de goma de mascar (chicle) en los trenes de Nueva York en el Siglo XIX. Ya en el siglo XX se inició la venta de bebidas gaseosas embotelladas y sándwiches y, después, las máquinas de café.
Pero hasta el día de hoy se siguen experimentando cambios significativos. Por ejemplo, ya tenemos las de snacks como papitas, chocolates, jugos, también de cupcakes, hasta de exquisiteces marinas como las ostras (en la Isla Ré en Francia) y lo último ha sido snacks saludables y orgánicos.
A nivel mundial, existe una fuerte tendencia de la población de ir adoptando un estilo de vida más saludable, lo que ha llevado a los gobiernos y empresas a impulsar programas y políticas que apoyen iniciativas para combatir la obesidad.
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Además, las tendencias de consumo demuestran que cada día más personas valoran los productos con componentes nutritivos y servicios que les faciliten la vida.
En la actualidad, estas máquinas (no solo de alimentos sino de distintos tipos de productos en general) son cada vez más comunes. La mayor concentración se encuentra en Japón existiendo aproximadamente 1 cada 48 habitantes, en Estados Unidos hay 1 cada 90, en Europa 1 cada 189 y en América Latina principalmente en Brasil 1 cada 4150.
¿Qué ofrecen?
La gran mayoría de las máquinas de vending nos ofrecen alimentos con muchas calorías y bajo valor nutritivo. Son productos que se consumen mucho porque son económicos y se encuentran en todas partes: estaciones de gasolina, sino en hospitales, lugares de trabajo, hasta en centros educativos.
Este hecho preocupa mucho a los profesionales de la salud ante el grave problema que es la obesidad a nivel mundial.
Un estudio realizado en la Comunidad de Madrid (España) concluyó que el 80,5% de los productos de las máquinas expendedoras tienen un mal perfil nutricional, son altamente energéticos, ricos en grasa o azúcar y pobres en micronutrientes y que solo el 10,5% son productos saludables.
Cuando se ofrecen estos alimentos energéticos y bebidas azucaradas en las máquinas de los colegios aumenta el riesgo de obesidad.
Snacks saludables
En base a estudios se sabe que la obesidad y las enfermedades relacionadas se producen principalmente por malos hábitos alimentarios, basados en el alto consumo de comidabasura, alimentos ricos en azucares y grasas.
Por ello en Estados Unidos existen políticas para que las empresas con más de cien empleados ofrezcan comida saludable y así el empleado, más sano, aumenta su productividad y disminuye su ausentismo.
En España también se están tomando medidas de control. El Gobierno ha acordado con la industria alimentaria, reducir en mas de 3.500 alimentos de aquí a 2020 los niveles de azúcar, grasas y sal.
Siguiendo con estas iniciativas, las máquinas expendedoras deberían contener:
- Fruta : Está aumentando la cantidad de snacks frutales, destacándose interesantes innovaciones como el de una empresa que comenzó a operar en el Reino Unido en octubre de 2011 y que ya se encuentran también en América Latina. Se especializa en ofrecer crisps frutales secados al aire y elaborados con frutas enteras, incluidos los carozos, la piel y las semillas, reteniendo así gran parte del valor nutritivo de la fruta original y sin el uso de aditivos.
- Agua: Las bebidas azucaradas podrían reemplazarse por botellas de agua (las hay aromatizadas).
- Sándwiches vegetales
- Ensaladas de frutas y/o vegetales
- Granolas
- Mix de frutos secos o deshidratados
- Yogures naturales o de frutas
- Chocolates bitter (es el que tiene más de 50% cacao)
- Cereales de granos
- Jugos de fruta natural
También existen máquinas Bio Vending con alimentos y bebidas orgánicas, naturales, para veganos, libres de gluten, conservantes, bajos en grasas y azúcares.
Es importante que los precios de estos productos saludables sean competitivos en relación con los no saludables. El precio no debe ser un impedimento a la hora de elegirlos. Y por último, sería conveniente realizar más campañas publicitarias y degustaciones de productos para que el consumidor los conozca y los pruebe antes de comprarlos.
Es una buena oportunidad de utilizar esta tendencia a nivel mundial de la población hacia una alimentación más sana para implementar y realizar estos cambios en las máquinas expendedoras. Es un gran paso para mejorar la salud nutricional de grandes y pequeños
Hoy celebramos a...