separateurCreated with Sketch.

Berrinches: claves para mantener la calma con tu hijo

Girl,Is,Angry
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Urška Leskovšek - publicado el 13/02/25
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
La paternidad está llena de retos, uno de los más importantes es lidiar con los berrinches de tu hijo, por eso te decimos cómo responder ante estas rabietas

Seguro que conoces situaciones en las que, por ejemplo, le dices a tu hijo que es hora de irse a casa y empieza a agitarse, tirarse al suelo y llorar histéricamente; o cuando no le das una golosina; o cuando le sirves la comida en el plato equivocado... Sin embargo, estos berrinches no son caprichos de tu hijo, ni intentos de ponerte con los nervios de punta.

1El niño no nos provoca

Es importante que los padres seamos conscientes de que la rabieta de un niño no va dirigida directamente a nosotros. El niño no ha elegido provocarnos en esta situación.

No es un complicador porque se niegue a comerse una manzana cortada de forma diferente a como él se la imaginaba. La situación es diferente de lo que él imaginaba, y es incapaz de controlar esta frustración. Lo expresa llorando, quizá pegando, destrozando, mordiendo, tirándose al suelo, etc. Estos fuertes sentimientos también pueden ser consecuencia del cansancio, hambre o malestar.

2Mantén la calma y no reacciones impulsivamente

El cerebro de un niño aún no es capaz de reaccionar con calma, por lo que necesita el cerebro de los padres, la llamada corregulación parental. Necesitan que un adulto les calme y les muestre la respuesta correcta.

Si los padres reaccionan a los estallidos de ira gritando, despreciando ("¡Mira lo que has hecho!", "¿Qué haces?") o castigando, el niño recibe el mensaje de que este tipo de expresión es normal. Te imitará.

Tampoco servirá de nada que sigas diciéndoles que se calmen. No puede. Por eso te necesita. Quédate con sus emociones.

Es crucial para el desarrollo de tu hijo que respondas con calma: que estés tranquilo, hables con calma y en voz baja. Que gestiones tus emociones, que le des a tu hijo un espacio seguro para expresarlas (permítele llorar y permanece tranquilo a su alrededor) y que le ayudes a gestionarlas.

3Cuídate

La clave, por supuesto, es no sentirse abrumados, cansados o estresados como padres. Ser emocionalmente estables. No siempre funciona, pero merece la pena intentarlo.

Sobre todo, significa que los padres deben dejar una buena cantidad de energía para sus hijos después del trabajo y los compromisos cotidianos.

4Cargas del pasado

En los retos de la paternidad podemos descubrir que arrastramos cargas de nuestra infancia, traumas no procesados que nos impiden responder con calma a los arrebatos de nuestros hijos.

En cierto modo, estamos acostumbrados a que los padres reaccionen gritando (porque probablemente nuestros padres nos gritaron a nosotros), y se lo transmitimos impulsivamente a nuestros hijos. En muchas familias no había espacio para expresar las emociones, o no sabían hacerlo. Quizá por eso llorar nos incomoda y nos da miedo. Es posible que en nuestra infancia hayamos sufrido abusos, soledad o abandono.

No es una educación permisiva

Este planteamiento no significa en modo alguno que des vía libre a tu hijo para que haga lo que quiera. Después de darle un espacio seguro y voz, debes establecerle con calma y respeto unos límites claros. El niño necesita saber que aunque es normal sentir rabia, tristeza, frustración, eso no significa que podamos pegar, gritar o lanzar objetos.

No tengamos miedo al crecimiento personal, sino tomemos estos retos como oportunidades para vivir más plenamente nosotros mismos. Con paciencia y amor, ayudaremos a los niños a convertirse en adultos emocionalmente estables y seguros de sí mismos.

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.