El Papa Francisco advirtió contra la tentación de creer “que lo sabemos todo” sobre Jesús, durante el Ángelus del 26 de enero de 2025. Esta advertencia se dirigió en particular a quienes crecieron “en un país de cultura católica”, invitándolos a reconocer cada día “el rostro del Hijo de Dios” en Jesús.
En la solemnidad del domingo de la Palabra de Dios, el pontífice comentó el evangelio del día, destacando cómo Cristo había suscitado “sorpresa y consternación” entre su pueblo cuando anunció que cumpliría las Escrituras. El pueblo de Nazaret “lo conocía como el hijo del carpintero José” y “nunca imaginó que podría presentarse como el Mesías”.
“Puede pasarnos a nosotros, como a sus compatriotas, pensar que ya lo conocemos, que ya sabemos todo sobre él”, subrayó el pontífice. Este encuentro con Cristo, insistió, se aplica también a quienes “crecieron con él, en la escuela, en la parroquia, en el catecismo, en un país de cultura católica”. Por lo tanto, Jesús es a veces “demasiado cercano” para algunos católicos, advirtió.
Jesús “lleva un anuncio de salvación que nadie más puede darnos”, dijo el Papa Francisco. Nos invitó a reconocer “el rostro del Hijo de Dios” en Jesús y a no quedar “escandalizados por su humanidad y su amor a los pequeños y a los pobres”.
Víctimas de lepra, periodistas y Acción Católica
Al final del Ángelus, el pontífice invitó a orar por las víctimas de la lepra y animó a quienes se comprometen con los enfermos con motivo de la Jornada Mundial de la Lepra, que se celebra cada 25 de enero. También acogió en particular a los periodistas y responsables de comunicación que participaron en el Jubileo del mundo de la comunicación , invitándolos a ser “narradores de esperanza”.
Desde el balcón del Palacio Apostólico, el Pontífice dio la palabra a un joven de la Acción Católica Italiana, cuyos miembros estaban presentes en gran número en la Plaza de San Pedro. Este último leyó un discurso en el que expresaba su sueño de que los grandes de la tierra “pasaran la Puerta Santa de la mano” y consiguieran “silenciar las armas”, antes de ser felicitado por el Papa.


