Hace 200 años, el pequeño Juan Bosco tuvo un impactante sueño que cambió su vida. Con él empieza el musical Sueños, de Toño Casado, que se representa en Madrid hasta el 17 de mayo.
La obra, ambientada en el mundo del circo, representa la historia del fundador de los salesianos, Don Bosco, patrono de los magos, del circo, del cine… Y transmite un mensaje: hay un sueño para ti.
Más de 600 personas asistieron a su estreno, el 4 de abril de 2024. En él, el rector mayor de los salesianos, el cardenal Ángel Fernández Artime, dijo que el “sueño de los 9 años” no fue solo el sueño de un chiquillo, sino también una visión y todo un programa de vida.
Su décimo sucesor al frente de la congregación, destacó algo que refleja el espectáculo de principio a fin: la gran importancia, en la vida del santo italiano, de sus dos madres: la de la tierra, Margarita, y la del cielo, la Virgen María.
“Juanito era un pastor de vacas, pero creyendo en los sueños, en Dios, en sí mismo y con la ayuda de su madre de la tierra y la de la virgen, logra ayudar a cumplir el sueño de muchos chicos”, resumió Toño Casado, autor también de 33, el musical.
“Necesitamos soñar, necesitamos ilusionarnos, necesitamos personas que nos hagan seguir adelante. Espero que Sueños se extienda a mucha gente”, dijo el compositor al final del estreno.
El sueño que cambió la vida de Juan Bosco
¿Cómo fue ese sueño tan impactante para el niño Juan Bosco? Él mismo lo explica muchos años después en sus Memorias Biográficas.
Se encontraba cerca de su casa, en una zona amplia donde se divertía un gran grupo de jóvenes.
Al escuchar que algunos blasfemaban, Juan se lanzaba sobre ellos usando sus puños y diciéndoles que se callaran.
Pero en ese momento aparecía un hombre vestido de blanco, cuyo rostro estaba tan iluminado que no era capaz de fijar su mirada en él. Le llamaba por su nombre y le pedía:
“No con golpes, sino con la mansedumbre y caridad deberás ganarte a estos, tus amigos. Ponte a instruirlos sobre la fealdad del pecado y la belleza de la virtud”.
Entonces los jóvenes paraban de hablar contra Dios y se ponían a escuchar al niño Juan.
El hombre de blanco le explicaba que con obediencia y la adquisición de la ciencia conseguiría lo imposible. Y también que, por medio de la “maestra” a la que su madre le enseñó a saludar tres veces al día, lograría ser sabio.
En aquel instante, Juan veía a “una mujer con aspecto majestuoso, vestida con su manto que resplandecía por todas partes”. Ella le tomaba de la mano, le mostraba cómo los jóvenes se habían convertido en muchos animales feroces y le decía: “He aquí donde tienes que trabajar. Hazte humilde, fuerte, robusto; y cuanto veas que ocurre ahora con estos animales, lo deberás hacer tú con mis hijos”.
Los jóvenes se convertían entonces, por la presencia de aquel hombre y de aquella señora en corderos mansos y alegres.
Sueños, el Musical estará en escena en Madrid hasta el 17 de mayo, en el Teatro de Salesianos Paseo.
Se representa los fines de semana abierto a todos los públicos; y entre semana, por las mañanas, para grupos, especialmente de escolares.
Hoy celebramos a...