La red social de vídeos YouTube se ha convertido en el nuevo espacio de predicación para las dominicas de la federación de monjas Nuestra Señora del Rosario.
El proyecto, que ya ha cumplido un año en línea, surgió cuando un de las hermanas del Monasterio de Santa María de Gracia, en Córdoba, sintió la inspiración de ofrecer un espacio de reflexión, grabando pequeños vídeos de comentario a la Palabra de Dios.
Se trata de compartir con los millones de personas que acceden a la plataforma de vídeos más grande uno de los tesoros más preciosos de estas religiosas: la “lectio Divina”, es decir, la “lectura en oración de la Palabra de Dios”.
Poco a poco la idea ha ido tomando forma como un canal de la Federación, en el que pueden participar religiosas contemplativas de todos los monasterios dominicos que la componen.
Sor Mihaela María, OP desde el Monasterio de Sana Ana de Murcia
Un proyecto distinto
El proyecto tiene un carácter único en Internet, pues en él cada monja ofrece su visión particular dentro de la Iglesia.
Los conventos de contemplativas, están en el mundo, pero su forma de vivir les permite observar y reflexionar con más serenidad. Ofrecen una predicación profunda desde su vida contemplativa.
Al constatar la falta de interés generalizada en la lectura de libros religiosos, las dominicas se han lanzado a la red como nuevo espacio para compartir su mayor riqueza.
Predicación en la red
Los vídeos van dirigidos fundamentalmente a toda persona en búsqueda. Las religiosas son conscientes de que las ofertas en las redes son innumerables, pero, desde su carisma de predicación de la Gracia, ofrecen un punto de vista único.
Las hermanas consideran en un comunicado emitido para presentar la iniciativa que, como Orden de Predicadores, es importante que “estén presentes donde está el mundo”. No son del mundo, pero están en él y participan de las esperanzas y anhelos de la humanidad.
Por su carisma, quieren llevar especialmente en el corazón los sufrimientos de todos los navegantes en la red. Por eso están en YouTube para que los que se encuentran en búsqueda espiritual puedan encontrar en su canal alimento.
El peligro
Son conscientes que, estar en las redes, tiene el peligro de dejarse distraer de su vocación contemplativa.
“Nosotras tendremos que estar atentas para que el estar en las redes no nos ocupe el corazón, pero sí ofrecer lo que Dios nos da en la contemplación para que otros puedan también entrar en este gozo”, afirman las religiosas en un comunicado con el que comparten esta iniciativa.
Este nuevo canal ha supuesto una forma preciosa de colaborar en Familia dominicana. Participan las hermanas de los monasterios que lo desean, y también colaboran los laicos, puesto que el montaje, grabación y edición de los vídeos lo hace un laico de la fraternidad de Córdoba.