Y un día el buzón habilitado para dejar recién nacidos en Amberes, Bélgica, se llenó de vida. Sucedió recientemente y se trató del primero desde 2019, según informó el alcalde de la ciudad, Bart De Wever.
Precisamente, el que tiene al bebé en brazos en la imagen es el propio alcalde, quien escribió lo siguiente en Instagram:
“Por ahora, soy el guardián de este pequeño milagro. Mis hijas lo llamaban bebé Finn. Al pequeño Finn no le faltará de nada”, expresó el alcalde.
Detrás de esta imagen no exenta de ternura y que llamó la atención en los últimos días se encuentra una organización (Moeders voor Moeders, que traducido sería madre para madres) encargada desde hace años de ofrecer a las madres que no puedan hacerse cargo de sus hijos una alternativa.
Si bien la asociación se hacer cargo de los niños y hasta inicia trámites de adopción, la madre puede dejar una pista para poder ser identificada con el paso del tiempo si es que así lo desea.
De momento, más allá del gesto y bonitas palabras, el propio alcalde recordó que la madre aúne está a tiempo de volver por su pequeño bebé. "Ella sigue siendo muy bienvenida a hacerlo después de todo", expresó. Mientras tanto ahí está este hombre, custodio de un pequeño milagro.