Las rosas de Santa Catalina es una receta tradicional que se sigue preparando con motivo del día de Santa Catalina de AlejandríaCelebramos el día de Santa Catalina con una receta tradicional realizada silenciosamente por las manos de las monjas en sus conventos durante el ora et labora, para llenar nuestras cocinas de santos, viejos y exquisitos aromas.
En el día de Santa Catalina de Alejandría una de las tantas tradiciones es preparar un dulce con una base de melaza llamado “Rosas de Santa Catalina” o “Las ruedas de Santa Catalina”, este dulce es una versión simplificada de las llamadas “flores de carnaval” o “flores de la mancha” preparadas en muchos lugares de España.
Además de este delicioso dulce, la festividad de Santa Catalina se celebra en muchas partes del mundo, en Europa y también en Latinoamérica.
En Colombia, por ejemplo, se encuentra la Catedral Basílica Metropolitana de Santa Catalina de Alejandría, una de las sedes episcopales más antiguas del mundo. Su celebración dura una semana, ya que realizan distintos festivales, y fiestas religiosas. Mientras que en Corrientes (Argentina), Santa Catalina de Alejandría es la patrona del Barrio Doctor Montaña, y allí es una tradición que los vecinos acompañen una procesión y misa en su honor.
Santa Catalina, la joven mártir
Santa Catalina es conocida como la patrona de los filósofos, estudiantes, de aquellos oficios se relacionen con el uso de las ruedas (camioneros, molineros, entre otros) y de las solteras.
Su origen se remonta al siglo IV, en Alejandría (Egipto), de familia noble, hija del Rey Costo. En su juventud como tenía mucha facilidad para el estudio y tuvo la oportunidad de recibir educación aprende mucho de filosofía, con el afán de conocer la verdad y descubrirla.
De acuerdo a la tradición, su conversión tuvo que ver con un sueño. Un día Catalina tiene un sueño que le hace cambiar, frente a ella ve una Mujer muy hermosa y un Niño en sus brazos, la mujer le sonríe, pero el pequeño le da la espalda.
Luego de esto, providencialmente, toma contacto con un ermitaño que le ayuda discernir lo ocurrido. Entonces conoce lo que es la Fe en Cristo y entiende que esa señal le advierte que, a pesar de sus dones, no es cristiana, por lo que decide bautizarse y continuar este camino.
Fue condenada a muerte por decapitación por el emperador romano Majencio, pero su cuerpo no llego a ser profanado porque unos ángeles trasladaron sus restos al Monte de Sinaí, donde siglos más tarde construyen el Monasterio de Santa Catalina en su honor.
En la imagen de Santa Catalina se puede apreciar que en su mano derecha lleva la rueda de molino con la que fue martirizada, y en su mano izquierda trae la palma -señal que falleció mártir- y el libro del Evangelio.
Rosas de Santa Catalina
Ingredientes
- 7 cucharadas de harina
6 huevos
6 cucharadas de agua
Preparación
Con la harina, los huevos y seis cucharadas de agua se prepara una masa blanda.
Una vez hecha, se fríe con mucho aceite.
La masa tiene que ir en un molde especial previamente calentado en el aceite. En él se va echando poco a poco la masa, llenando cada unidad sólo hasta la mitad.
Cuando esté cuajada, se saca el molde, se deja enfriar la rosa y se saca.
Aparte, se cuece miel durante un minuto como máximo; se echa sobre cada rosa una cucharada de miel.
Valor nutricional
Este dulce es una preparación sencilla, utiliza ingredientes que generalmente tenemos en casa, harina, agua, aceite, huevos y miel, saludables, pero que debemos cuidar la cantidad y la frecuencia con la que comemos esta preparación. Porque es una fritura y además es dulce.
En esta oportunidad es importante destacar esta técnica de preparación, que es muy utilizada, pero que genera un poco de temor a la hora de consumir productos realizados con esta técnica (la fritura).
Primero decir que es una técnica que aporta calorías extra a los alimentos, pero que a su vez puede ser útil para hacer más atractivos alimentos saludables, como el pescado o la verdura.
El problema con esta técnica es que la calidad de las frituras no siempre es la adecuada, ya que no se respeta el punto de cocción, se realizan rebozados excesivos y, sobre todo, se cocina con aceites refinados, no aptos para altas temperaturas, y por tanto son menos saludables.
Por lo tanto, si hacemos una fritura de forma correcta y esporádicamente no es dañino para nuestra salud.
¿Cómo hacer una buena fritura?
Eligiendo un buen aceite, que soporte altas temperaturas (150- 180 grados) sin deteriorarse como puede ser el aceite de oliva virgen extra, aceite altooleico, entre otros, pero no el de soja.
Controlando la temperatura, cada alimento necesita un tiempo y temperatura diferente de cocción (algunos 150 grados otros 180 grados). Cuando empieza a salir humo, ya es mala señal, indica que el aceite se esta quemando, esto hace perder sus propiedades y además genera compuestos dañinos para la salud como la acrilamida.
Una fritura corta hace que se conserven mejor las propiedades del aceite y del alimento.
Rebozados finos, si el alimento que se va a freir necesita rebozado, por ejemplo, un pescado, lo ideal es utilizar harina de garbanzo o mezclarla con la de trigo, para ligar, es mejor mezclar agua con gas fría y huevo, sin olvidad siempre retirar excesos de harina para que absorba menos aceite.
Eligiendo una cacerola adecuada, debe utilizarse una cacerola con cierta profundidad para llenarla con aceite suficiente para que no se pegue el alimento en el fondo.
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