Una imagen llena de devoción que soportó terremotos, lluvias e incendios sin que nada le pasara, solo algún “embate” por del amor de los peregrinos
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“24 horas de oración por el fin de la pandemia”. He aquí la consigna para este 12 y 13 de agosto lanzada en las diócesis de peruanas de Tacna y Moquegua con el fin de que los fieles recen desde sus hogares por las víctimas del coronavirus y pongan la mirada de esperanza en el Señor de Locumba.
¿Ahora bien, por qué recurrir a él en este momento y por qué despierta tanta devoción en Perú?
Se trata de una imagen de Jesús crucificado que cada 14 de septiembre –fecha fijada para su gran homenaje- suele recibir a un gran número de peregrinos en su santuario que también es reconocido como la Iglesia del Señor de los Pies Quemados.
Ubicado en la localidad de Locumba, provincia de Jorge Basadre (Tacna), este santuario e imagen carga una larga tradición de fe que tiene su origen hace más de 200 años cuando –indican varios relatos– se le aparecen a un hacendado en el interior de dos cajones de madera –cargados sobre mulas- dos imágenes del Señor crucificado y con alusiones al “Valle de Locumba”.
Desde aquel suceso, hasta la fecha, fueron muchas las anécdotas y circunstancias que provocaran el gran seguimiento de esta imagen como protectora. Incluso, se recuerda, por ejemplo, que en 1784 durante un terremoto el templo que cobijaba la imagen fue destruido, pero a ésta no le pasó nada.
Esto llevó a la construcción de un nuevo templo, que años más tarde también sufriría los efectos de un terremoto (2001). Pero la imagen, que no estuvo exento de soportar otras adversidades como incendios y lluvia, solo ha sufrido los “embates” del pueblo creyente, principalmente en la zona de los miembros inferiores, situación que hizo que tuviera que ser restaurada.
En tanto, la ferviente devoción también ha estado asociada en los últimos siglos a intervenciones vinculadas a hambrunas, sequías y hasta epidemias.
No en vano por estas horas, desde lugares como Tacna en Perú, una vez más se vuelve a poner la mirada sobre el Señor de Locumba para implorar por el fin del coronavirus, la pandemia que tiene en vilo al mundo entero en 2020.
La Diócesis de Tacna y Moquegua convocó a todos los fieles a participar desde sus hogares de la Jornada «24 horas de oración por el fin de la pandemia» que se llevará a cabo los días 12 y 13 de agosto en el Santuario Señor de Locumba.https://t.co/bAuM4Oh0ut
— ANCEP Noticias (@ancep_peru) August 10, 2020
A continuación las imágenes de la gran devoción en tiempos donde la aglomeración de personas era manifestación de una fiesta y peregrinación que también han sido declaradas Patrimonio Cultural de la Nación por el Ministerio de Cultura de Perú en 2015:
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