Piden intensificar “oraciones y sacrificios por el amor de Dios y el amor a nuestro prójimo”En algunos sitios de Estados Unidos, como por ejemplo en Seattle o en Chicago, los templos católicos han cerrado sus puertas a todo acto litúrgico, mientras que en Los Ángeles y otras ciudades se ha dispensado a los fieles que, en conciencia, no puedan asistir a Misa dominical o a las ceremonias de precepto.
Medidas drásticas, pero necesarias ante la pandemia del coronavirus, misma que ha motivado a los obispos católicos de los Estados Unidos a confiar a la nación a Nuestra Señora de Guadalupe, pidiéndole su intercesión por el país y por el mundo.
En una declaración emitida el 13 de marzo, el presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), el arzobispo de Los Ángeles, José H. Gómez, exhortó a los católicos estadounidenses a intensificar “oraciones y sacrificios por el amor de Dios y el amor a nuestro prójimo”.
“Acerquémonos unos a otros en nuestro amor por Él y volvamos a descubrir las cosas que realmente importan en nuestras vidas”, dijo el arzobispo de Los Ángeles quien subrayó en su reciente comunicado que el brote de coronavirus es un recordatorio de “la fragilidad de nuestras vidas” y de “nuestra humanidad común: que los pueblos de este mundo son nuestros hermanos y hermanas, que todos somos una familia bajo Dios”.
Más adelante recalcó el prelado de origen mexicano que “Dios no nos abandona, Él nos acompaña incluso ahora en este tiempo de prueba”. Añadió: “ En este momento, es importante para nosotros anclar nuestros corazones con la esperanza que tenemos en Jesucristo”.
El presidente de USCCB expresó su unidad con el Papa Francisco al pedir oraciones por aquellos que se enfermaron o perdieron seres queridos por el virus, así como por los profesionales de la salud y líderes cívicos: “Que Dios les conceda coraje y prudencia en su intento de responder a esta emergencia con compasión y al servicio del bien común”.
Finalmente, exhortó a los católicos a “buscar juntos la intercesión materna de Nuestra Señora de Guadalupe” y compartió la siguiente oración:
*Santa Virgen de Guadalupe, **Reina de los Ángeles y Madre de las Américas, acudimos a ti hoy como tus amados hijos. Te pedimos intercedas por nosotros ante tu Hijo, así́ como lo hiciste en las Bodas de Caná. Ora por nosotros, amorosa Madre y obtén para nuestra nación, para el mundo, y para todas nuestras familias y nuestros seres queridos, la protección de tus santos ángeles, que seamos librados de lo peor de esta enfermedad.*
*Para aquellos que ya están afligidos, te pedimos que obtengas la gracia de la salud. Escucha el lamento de quienes están vulnerables y temerosos, lava sus lagrimas y ayúdales a confiar. En este tiempo de prueba, enséñanos a todos en la Iglesia a amarnos unos a otros y a ser pacientes y amables. Ayúdanos a traer la paz de Jesús a nuestra tierra y a nuestros corazones.*
*Venimos a ti con confianza, sabiendo que tú eres realmente nuestra madre compasiva, **la salud de los enfermos y la causa de nuestra alegría. Danos albergue bajo el manto de tu protección, mantennos bajo tu abrazo, ayúdanos siempre a conocer el amor de tu Hijo, Jesús.*
*Amén.