El president Erodogan recuerda que el estado tiene que proteger el derecho a culto de todosSiete años cerrada. La Iglesia de San Esteban (Sveti Stefan Church), estaba clausurada por restauración, decían. Y así ha sido. No era un cierre caprichoso. Esta iglesia de la comunidad cristiana ortodoxa búlgara, un edificio del siglo XIX en Estambul, de mayoría musulmana, ha reabierto sus puertas y lo ha hecho a bombo y platillo, con el president turco Recep Tayyip Erdogan, con el Primer Ministro Binali Yildririm y con el Primer Ministro búlgaro Boyko Borissov.
Evidentemente, no se trata de una mera restauración de una iglesia, sino de la libertad de culto en un país en que las restricciones a las libertades se han puesto sobre la mesa.
Erdogan ha aprovechado la ocasión para recordar que el estado turco es responsable a la hora de asegurar a todos, sin importer sus creencias, del derecho de practicar su religión libremente. “Algunas memorias amargas no han de dejar que se tiña la larga historia de convivencia”, dijo.

Esta famosa iglesia, conocida también como la “iglesia de hierro”, es la única iglesia del mundo construida básicamente con hierro, y en su restauración han intervenido Turquía y Bulgaria. Está situada en Balat, un histórico barrio de Estambul. La mayor parte de los millones que ha costado la restauración, aproximadamente 4,5 millones de dólares, han corrido a cargo del estado turco.
El gobierno turco ha explicado que ha dado fondos para restaurar más de 5.000 edificios en Oriente Medio, el Norte de África y los Balcanes y dijo que desde 2002 se están devolviendo propiedades a judíos y griegos en su zona. Aya Yorgi en Estambul ha sido devuelta a los ortodoxos griegos, y Aya Nikola en Gökçeada también, así como la iglesia sirio católica de Iskenderun.

La iglesia se construyó con 500 toneladas de hierro de Austria en 1898. La huella cristiana búlgara se remonta al siglo XVIII en Estambul, y la iglesia es también un símbolo cristiano en la ciudad, que quedó devastada cuando los otomanos tomaron Constantinopla (Estambul) en 1453.

La iglesia está abierta de 9 a 17 horas y aunque la comunidad búlgara es pequeña y no puede celebrar el culto diariamente, sí lo hará en festividades litúrgicas señaladas, y, sobretodo, será un aliciente para los turistas que podrán visualizar la presencia cristiana en tierra turca.