separateurCreated with Sketch.

Don Quintino Sicuro, ¿futuro patrón de las vocaciones frustradas?

whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Cyprien Viet - publicado el 31/01/25
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
El 27 de enero, el Papa Francisco reconoció formalmente las "virtudes heroicas" de un sacerdote italiano muy atípico, Don Quintino Sicuro (1920-1968), que se hizo ermitaño tras un caótico periplo personal que incluyó la ruptura de un compromiso y varios intentos fallidos de vida religiosa. Este futuro beato en potencia demuestra que las vocaciones no se construyen en línea recta

Don Quintino Sicuro tiene un nombre pegadizo que suena a alegre personaje de cómic infantil, y de hecho su aventurero y caprichoso viaje, todo líneas curvas, podría inspirar algunos libros encantadores. Nacido el 29 de mayo de 1920 en el seno de una familia campesina muy piadosa de Apulia, región del sur de Italia, el pequeño Quintino manifestó su deseo de entrar en la vida religiosa en la escuela primaria, pero no superó el examen de ingreso. Se dirigió al instituto técnico-industrial de Gallipoli… que abandonó antes de completar su formación, optando por alistarse en la Guardia di Finanza, el equivalente italiano de la policía de fronteras.

Tras combatir en el frente balcánico al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, el joven Quintino se unió a la resistencia antifascista. Fue capturado y encarcelado, pero logró escapar de una forma extraña: disfrazado de sacerdote, se dirigió en bicicleta al sur de Italia, ahora bajo control aliado.

En la inmediata posguerra, el subbrigadier de la Guardia di Finanza vuelve al servicio. El encantador joven vive muchas aventuras románticas, antes de comprometerse con Silvia, una joven maestra con la que planea casarse. Pero la pasión espiritual de su infancia regresa. En 1947, ingresa en los frailes franciscanos de Ascoli-Pisceno. Su vocación se ve frustrada una vez más: su experiencia comunitaria dura solo dos años.

En 1949, decide vivir la soledad y la abnegación radical en un eremitorio de Montegallo, en la provincia de Las Marcas, y cuatro años más tarde se traslada a otro eremitorio, aún más aislado, en el monte Fumaiolo. Allí encontró por fin su verdadera vocación.

Este monje atípico, que dormía sobre piedras y se alimentaba de hierbas, reconstruyó con sus propias manos esta ermita en ruinas y recibió visitas que apreciaban sus consejos espirituales.

Recibió el apoyo del obispo de Sarsina, que lo ordenó sacerdote en 1959, permitiéndole por fin, a sus casi 40 años, obtener la formación teológica y el marco canónico que nunca había logrado encontrar en el curso de su atormentada búsqueda espiritual. En acción de gracias, don Quintino Sicuro peregrinó a pie a Lourdes.

Sabios consejos de un hombre inclasificable

El ermitaño, ahora sacerdote, nunca tuvo responsabilidades parroquiales, pero su vocación original fue reconocida y apoyada por su diócesis. En los años sesenta, muchos párrocos de la región le enviaban jóvenes en búsqueda espiritual, a los que recibía con caridad para confesarse. Les invitaba a "presentarse ante Dios como un pobre: sin ideas, pero con una fe viva".

"Detente en un acto de amor ante el Padre. No intentéis llegar a Dios por la inteligencia: nunca lo conseguiréis; llegad a Él por el amor: es posible", exhortaba este sacerdote que había encontrado su camino hacia Dios por senderos tortuosos.

Don Quintino Sicuro se desplomó sobre la nieve en la mañana del 26 de diciembre de 1968, fulminado por un infarto a los 48 años, cuando se disponía a bendecir una nueva infraestructura de remontes mecánicos que iba a inaugurarse ese mismo día. Este monje fuera de lo común, que cavó su propia tumba con sus propias manos cerca de su ermita, descansa ahora en la montaña a la que había dedicado los últimos años de su vida.

La diócesis de Cesena y Sarsina introdujo su causa de beatificación en 1985, y 40 años después ha dado un importante paso adelante. Sin embargo, el reconocimiento de sus "virtudes heroicas" no allana automáticamente el camino hacia su beatificación. El dicasterio para las Causas de los Santos aún tendrá que identificar formalmente un milagro atribuido a su intercesión, un proceso que podría llevar varios años más o incluso décadas.

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.