Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
Si tienes un hermano o familiar que se ha alejado de Dios, es natural que te sientas preocupado o incluso frustrado por no saber cómo ayudarlo. Sin embargo, es fundamental recordar que el camino de la fe es personal y único para cada individuo.
La verdadera ayuda surge cuando abordamos la situación con amor, paciencia y comprensión, confiando en que Dios tiene un propósito para cada vida.
Te invitamos a orar con esta hermosa plegaria, pidiendo a Dios que toque su corazón y guíe su camino.