Gianfranco Chiti, nacido el 6 de mayo de 1921 en Gignese, dedicó su vida a servir a su país y a su fe. Desde joven, su profunda devoción a la Virgen María lo acompañó en todos sus momentos, incluso en los horrores de la guerra, donde luchó en frentes de Croacia, Grecia y Rusia.
A lo largo de su vida, se destacó no solo por su disciplina militar, sino por su generosidad y su incansable labor en favor de los más necesitados.
Descubre su increíble testimonio que lo llevará a los altares de este general nazi, que se convirtió en fray.