Campaña de Cuaresma 2025
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La Semana Santa no es solo una memoria: es una invitación a entrar con Jesús en su Pasión, Muerte y Resurrección. El Triduo Pascual, que inicia con la Misa del Jueves Santo y culmina en la Vigilia Pascual. Es el corazón del año litúrgico. Aquí tienes siete formas concretas de unirte espiritualmente a Jesús, desde lo cotidiano, con el alma dispuesta.
1. Jueves SantoLava los pies con amor
Haz un gesto de servicio humilde hacia alguien cercano. Así como Jesús lavó los pies a sus discípulos, tú puedes hacerlo al ofrecer tu ayuda en casa, lavando los trastes, perdonando un malentendido, o a través de un gesto concreto de cariño hacia alguien que no lo espera.
Son esos actos de servicio, sin quejas y sin esperar nada a cambio, los que nos asemejan a Cristo mismo, pues estamos llamados a servir con amor, como Él nos lo recuerda en su Evangelio:
"Les he dado ejemplo para que hagan lo mismo que yo hice con ustedes" (Jn 13,15)
2. Jueves Santo en la noche Ofrece una hora santa

Acompaña a Jesús en el Getsemaní con oración en silencio. Aunque sean 15 minutos, quédate en silencio, sin tu celular, sin distracciones. Medita sobre cómo Jesús afrontó la soledad y el miedo.
Ofrécele tu propia angustia o la de otros. Puedes apoyarte en aquel pasaje bíblico que narra el momento de Jesús en el huerto.
"¿No pudieron velar conmigo ni siquiera una hora?" (Mt 26,40)
3. Viernes Santo Ayuna del ego
Haz un ayuno, no solo de comida, sino de orgullo, quejas o protagonismo. Además del ayuno corporal, haz un sacrificio interior. No discutir, no responder con impaciencia, no buscar quedar bien… Pequeños "sí" que te unen a la entrega silenciosa de Jesús.
Este día de luto, medita sobre el gran sacrificio de amor que hizo Jesús en nuestro nombre y responde con el mismo amor, un amor que es fiel, valiente y sin queja, como lo vemos en el libro de Isaías.
"Como cordero llevado al matadero, no abrió la boca" (Is 53,7)

4. Viernes SantoAbraza tu cruz concreta
Identifica un sufrimiento, ofrécelo y únelo a la Cruz. Puede ser una enfermedad, un dolor emocional, un problema familiar. No huyas hoy: abrázalo con Él.
Muchas veces, humanamente hay situaciones que en el momento no podemos entender, pero Dios conoce el para qué de cada cosa, puedes colocar una cruz visible en tu hogar, bésala o simplemente contempla su amor.
5. Sábado santo Permanece junto a María

Vive en silencio y a la espera con María. El Sábado Santo, es el día del silencio de Dios. ¿Te sientes en una etapa así? María también. Pero esperó. Hoy, elige no estar a prisa, no llenar tu día de cosas. Permanece en oración y en sentido de reflexión, confiando al igual que nuestra Madre amada.
"Ella guardaba todas estas cosas y las meditaba en su corazón" (Lc 2,19)
6. Sábado en la noche Prepara tu casa y tu corazón para la Resurrección
Haz limpieza, pon flores, inunda tu hogar con espíritu de alegría, y sobre todo, perdona. La Pascua no es solo una celebración cualquiera. Es dejar que Jesús entre al sepulcro de tu vida y lo llene de luz. ¿Qué necesitas perdonar o sanar para resucitar con Él?
7. Domingo de resurecciónCelebra la vida
Haz algo que exprese alegría verdadera: canta, comparte, agradece. La iglesia está de fiesta. En el Domingo de Pascua, ¡no te guardes la alegría! Prepara una comida especial para tu familia y amigos, comparte con quien está solo, canta un aleluya con entusiasmo, pues ¡Él verdaderamente ha resucitado y la tumba está vacía!
"Este es el día que hizo el Señor: ¡sea nuestra alegría y nuestro gozo!" (Sal 117,24)
Esta Semana Santa, no seas solo espectador. Sé parte. Camina con Él. Y deja que te transforme.


