El Papa Francisco está "bien", está "consciente" y "alerta" tras la operación a la que fue sometido el 7 de junio de 2023 por una hernia intestinal con riesgo de obstrucción, aseguró el cirujano Sergio Alfieri, que ha intervenido en el Hospital Gemelli de Roma, durante una rueda de prensa alrededor de las 19:30 horas.
Una hora antes, la Santa Sede había comunicado que la intervención se había desarrollado "sin complicaciones" y había durado tres horas. Para este tipo de operaciones, el personal médico espera de "5 a 7 días" de convalecencia en el hospital.
El Papa "respondió bien" a la cirugía y anestesia general, dijo el Dr. Sergio Alfieri, director del departamento de ciencias médicas y cirugías abdominales y endocrinas del Gemelli. El pontífice, de 86 años, "está bien", está "despierto", "alerta", y "ya hizo su primera broma hace 10 minutos", informó el experto en cirugía del aparato digestivo, que ya había realizado la operación de colon a la que se sometió el Papa en julio de 2021. "¿Cuándo es la tercera?", bromeó el Papa al despertar, según cuenta el cirujano.
A última hora de la mañana, tras haber celebrado la audiencia general sin aparente cansancio, el Papa había salido del Vaticano hacia las 11:15 horas para acudir al policlínico Gemelli, situado al noroeste de Roma, para una intervención quirúrgica programada. Un comunicado de prensa oficial indicó entonces que el pontífice iba a someterse a anestesia general para colocar una "prótesis" en la "pared abdominal" con el fin de corregir los efectos de una hernia con riesgo de oclusión.
Durante la cirugía, explicó Sergio Alfieri, se encontraron "adherencias tenaces", debidas a cicatrices de viejas operaciones, en particular por peritonitis cuando Jorge Mario Bergoglio estuvo en Buenos Aires. Estas cicatrices provocaban "síndromes de dolor cada vez más frecuentes". La operación, concertada en los últimos días por el equipo médico que asiste al pontífice argentino, ha liberado estas adherencias y reparado el síndrome herniario mediante cirugía plástica de la pared abdominal, utilizando una "red protésica".
El Papa no tiene otra enfermedad
El Papa Francisco había acudido el día anterior, 6 de junio, al Gemelli, para los reconocimientos médicos previos a la operación. El pontífice "no tiene otras enfermedades" y "no se ha encontrado otra patología", aclaró Sergio Alfieri. Y precisar también que el Papa "nunca ha tenido problema con la anestesia general, ni hace dos años, ni hoy". Pero "a nadie le gusta estar dormido", subrayó en referencia a las declaraciones del pontífice diciendo que "soportó mal" la anestesia de julio de 2021.
El cirujano dijo que planeó "5 a 7 días" de descanso para este tipo de operación, sugiriendo, sin embargo, que la edad del pontífice podría conducir a una convalecencia más prolongada. La prefectura de la Casa Pontificia ya ha cancelado las audiencias previstas en la agenda pontificia hasta el 18 de junio.
La Santa Sede también ha publicado los nombres de la decena de médicos que vigilaron al jefe de la Iglesia católica durante esta operación. Sergio Alfieri estuvo asistido por los doctores Valerio Papa, Roberta Menghi, Antonio Tortorelli y Giuseppe Quero.
La anestesia general estuvo a cargo del profesor Massimo Antonelli, asistido por Teresa Sacco, Paola Aceto, Maurizio Soave y Giuseppina Annetta. También estuvieron presentes en el quirófano el profesor Giovanni Battista Doglietto, director del Fondo de Asistencia Sanitaria del Vaticano, y el doctor Luigi Carbone, médico de la Dirección de Salud e Higiene de la Ciudad del Vaticano.