Martha Liria Sepúlveda Campo. Aquí el nombre completo de la mujer de 51 años que por estos días se ha transformado en tema de conversación en Colombia. Se trata del primer paciente con un diagnóstico no terminal que accederá a la aplicación de la eutanasia en Colombia este domingo 10 de octubre.
La protagonista de esta historia sufre esclerosis lateral amiotófica, conocido como ELA, desde hace tres años. En los últimos días fue entrevistada por el medio local Noticias Caracol y fue ahí donde reafirmó su deseo de aplicarse la eutanasia.
"Estoy más tranquila desde que me autorizaron el procedimiento me río más y duermo más tranquila", expresó durante ese encuentro con Juan David Laverde.
El caso de Martha impacta. Esto no solo por todo lo que implica la eutanasia, que es legal en casos graves en Colombia desde 1997, sino por la discusión en torno al fallo de la Corte Constitucional del mes de julio –que mereció hasta el pronunciamiento de la Iglesia- que ofreció nuevos alcances en casos no terminales. Cuatro días después de aquello, Martha solicitó el procedimiento. Pero también llama la atención habida cuenta de que Martha se dice católica, acude a misa y pretende aplicarse la eutanasia un domingo.
"Yo estoy totalmente tranquila, soy una persona católica, me considero muy creyente de Dios. Pero repito, (Dios) no me quiere ver sufrir a mí. Yo creo que a nadie. Ningún padre quiere ver sufrir a sus hijos", expresó en un momento de la entrevista.
"Yo sé que el dueño de la vida es Dios. Nada se mueve sin la voluntad de él, pero yo creo que él esta permitiendo eso. El me está premiando porque no voy a estar postrada en una cama (...) Lucho por descansar", agregó la mujer, que tiene 11 hermanos.
Este 6 de octubre, desde la diócesis de Riohacha, el obispo local de nombre Francisco, también vinculado a los asunto de la defensa de la vida, se atrevió a emitir un emotivo mensaje con respecto a este caso.
“Le quiero manifestar a mi hermana Martha que no está sola, que el Dios de la vida siempre nos acompaña. Que su tribulación puede encontrar un sentido trascendente si se convierte en una llamada al Amor que sana, al Amor que renueva, al Amor que perdona”, señaló Ceballos.
“Martha, la invito a reflexionar serenamente sobre su decisión; ojalá, si las circunstancias se lo permiten, lejos del acoso de los medios de comunicación que no han dudado en tomar su dolor y el de su familia, para hacer una suerte de propaganda de la eutanasia, en un país profundamente marcado por la violencia”, prosigue.
Por último, el obispo invita a los católicos a unirse en oración por Martha, por su hijo, familiares y profesionales que la están asesorando con el fin de que Dios la “colme con su misericordia”. El obispo cerró la carta también invitando a la propia Martha a la misa del próximo 9 de octubre en la Iglesia Catedral Nuestra Señora de los Remedios de Riohacha para rezar por su vida.