¿Sabes cuál es el origen de la Novena de las rosas y por qué está relacionada con santa Teresita del Niño Jesús?
La joven carmelita, fallecida a los 24 años, decía que en el Cielo pasaría su tiempo "haciendo el bien en la tierra".
Y añadía: Después de mi muerte haré caer una lluvia de rosas.
Se refería a las gracias que donaría a quien pidiera su intercesión.
La "Novena de las rosas" nació por casualidad: en 1925, el jesuita Putigan empezó a rezar una novena para invocar una gracia de Dios por intercesión de santa Teresita y pidió una rosa como signo de benevolencia.
La obtuvo al tercer día, junto a la gracia, y así empezó otra novena y pidió otra rosa...
Desde entonces esta devoción se difundió por todo el mundo. Y las gracias continuaron lloviendo del cielo.
A menudo quien la reza recibe signos de confirmación en forma de rosas.
Pero lo que realmente florece cuando nos encomendamos a Dios es nuestra vida.
Esto nos enseña la misma historia de santa Teresita que entró en la clausura para "esconderse por amor a Jesús" y se volvió signo poderoso de Dios entre los hombres.
La novena consiste en una oración que se repite cada día seguida de 24 "Glorias" en agradecimiento a Dios por los dones concedidos a santa Teresita en los 24 años de su vida.
Después de cada "Gloria" se reza la invocación:
Puede empezarse en cualquier momento. Los devotos de santa Teresita prefieren rezarla el día 9 del mes, día en que el sacerdote Putigan la inició por primera vez.