Se trata de un verdadero ícono de la televisión chilena. La actriz Claudia di Girolamo se ha destacado tanto en teleseries, pero también con directora de teatro, además incursionar en el cine. Nacida el 30 de diciembre de 1956, esta actriz chilena ha consolidado una gran trayectoria con varias distinciones. Por citar solo un ejemplo, en 2006 fue elegida la Mejor actriz chilena de todos los tiempos por la lista de Chile elige.
Pero los antepasados de esta actriz chilena son italianos y es ahí donde cobra sentido algo que sucedió en la tarde del 13 de junio en una iglesia.
El reencuentro con su abuelo….
Fue precisamente en la Catedral de Villarrica donde la actriz se reencontró con su abuelo, a través del arte, luego de una emocionante visita que es reproducida por la Iglesia de Chile.
Lo hizo luego de estar frente a frente con una de las obras del autor Giulio Di Girolamo Antonuzzi en el que se aprecia un fresco de la crucifixión de Jesús.
“Hoy, gracias a Dios, me encuentro frente a la obra de mi abuelo ‘nonno’ di Girolamo. Recuerdo perfectamente cuando la estaba pintando. Vinimos en familia a acompañarlo. Él hizo unos andamios muy grandes para alcanzar la altura necesaria y nosotros le ayudábamos a mezclar los colores y corríamos por los andamios. Después, íbamos con mi nonna (mi abuela) a la playa a caminar con mi madre, mi padre y mis hermanos”, expresó la actriz en diálogo con el padre Erwin Sanhueza, vicario parroquial de la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús.
Familia unida y católica
La reflexión de la actriz continuó con respecto a su familia. “Es una obra para mí que tiene que ver con mi familia, con la historia familiar. Con una familia muy unida, súper católica, muy humanista, muy artista. Y encontrarme con esto me emociona muchísimo”, indicó.
“Además, el nonno (mi abuelo) es un hombre que ha dejado su arte por todo el territorio nacional y nosotros pensamos como familia que debería ser declarado ‘Patrimonio Nacional’, porque realmente son obras magníficas, que enlazan no solo su religión sino que además trasciende la religión y hablan de lo humano y de lo divino, que nos conecta a todos independientemente de lo que creamos como religión”, prosiguió.
“Hoy día podríamos decir que fue un hombre que vio el futuro, la inclusión de los pueblos originarios y el respeto que hay que tenerles”, agregó.
Una belleza muy grande
Por último, la actriz dejó el siguiente mensaje a los habitantes de Villarrica: “Quiero enviarles un gran saludo y un abrazo muy fuerte en estos tiempos difíciles. Pensar que vamos a salir adelante. Es una belleza muy grande la que ustedes tienen y hay que gozarla, disfrutarla, traer a los niños, contarle las historias. Los abrazo con todo mi corazón y mi alma. Para mí es un orgullo ser la nieta de este gran artista”.
¿Quién era su abuelo?
Nacido en la ciudad de L’Aquila degli Abruzzi, Italia, el 22 de agosto de 1902, Giulio Di Girolamo Antonuzzise ha destacado como pintor y artista autodidacta. En base al Museo Nacional de Bellas Artes, la Iglesia de Chile recuerda que desde niño demostró sus habilidades plásticas, También, que con solo 15 años fue contratado como pintor en distintas empresas de Roma.
En 1918 hizo su primera exposición de óleos. Ya en 1925 obtuvo la Licenciatura en Arte de la Accademia di Belle Arte de Roma. Pero también se destacó por pintar diversos murales en conventos e iglesias, además de diseñar vestuarios para la ópera, entre otros.
En el año 1948, durante la posguerra, emigró a Chile en procura de un futuro mejor. Lo hizo junto a su esposa y tres hijos. Fue en ese país donde abrió una academia e impartió clases de pintura, dibujo, ente otras.
En 1972 regresó a Italia donde, prosigue la reseña, se desempeñó como consultor artístico de la Santa Sede, además de dedicarse a la restauración de obras de arte y pintura.
Volvió a Chile de manera definitiva en 1991, país donde falleció el 5 de junio de 1998, pero su legado ha quedado plasmado. Hoy, más de 20 años después, su nieta, una reconocida actriz chilena, se vuelve a emocionar con tanta belleza.
Hoy celebramos a...