Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
San Pablo escribe en su carta a los tesalonicenses: "Oren sin cesar" (1 Tesalonicenses 5,17). Si bien esto se puede interpretar de varias maneras, una opción es tratar de mantener a Dios siempre en tu mente, al menos en algún nivel.
A veces esto es más fácil de hacer cuando estamos realizando las tareas más mundanas, como caminar por la calle.
Todo lo que hacemos puede ofrecerse a Dios como un sacrificio, y podemos unir toda nuestra vida a aquel que murió por nosotros.
Aquí hay una oración simple que se puede rezar mientras se camina, que nos recuerda los muchos pasos que Jesucristo tomó durante su Vía Crucis.
De esta manera, una acción simple puede ser santificada y podemos estar agradecidos a Dios por el amor que ha derramado por nosotros.
¡Divino Jesús! Unifico todos mis pasos a los que diste por mí; deseo unirlos, especialmente, a aquellos que diste durante tu amarga Pasión.