¿Podemos convertir este desierto en un jardín de comunión con Dios?Soledad, sequía falta de esperanza. Todo esto es lo que nos viene a la mente cuando pensamos en un desierto. Desde el inicio de la Cuaresma esta imagen acompaña el camino hacia la Pascua.
Es ahí donde aparece la invitación del papa Francisco para este año 2019, cuya propuesta se basa en una “Cuaresma ecológica”.
Descubre los desiertos más asombrosos de la Creación, lugares solitarios, pero también maravillosos para contemplarlos, admirarlos y reflexionar sobre la gran propuesta de transformar nuestro camino durante este tiempo de Cuaresma en jardín de comunión con Dios: (hacer click en galería)
“La ‘Cuaresma’ del Hijo de Dios fue un entrar en el desierto de la creación para hacer que volviese a ser aquel jardín de la comunión con Dios que era antes del pecado original (cf. Mc 1,12-13; Is 51,3)”, escribe.
“Que nuestra Cuaresma suponga recorrer ese mismo camino, para llevar también la esperanza de Cristo a la creación, que será liberada de la esclavitud de la corrupción para entrar en la gloriosa libertad de los hijos de Dios”, añade.
Por último, además, de recordar las tres herramientas de los tiempos de crecimiento espiritual (el ayuno, la oración y la limosna), nos sorprende con el uso del lenguaje y de la ecología y muestra una gran esperanza:
“Volver a encontrar así la alegría del proyecto que Dios ha puesto en la creación y en nuestro corazón, es decir amarle, amar a nuestros hermanos y al mundo entero, y encontrar en este amor la verdadera felicidad”.
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