Llevan ayuda a padre humillado por tener un hijo asesino, el gesto que sorprende a Perú
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“Yo soy el padre de un asesino”. Así rezaba el cartel que recientemente hizo romper en llanto a Martín Rodríguez, un peruano de 61 años. Este hombre fue obligado a cargar con este mensaje en la localidad peruana de Kunurama.
El hecho surgió como respuesta a los crímenes de su hijo, Wilfredo Rodríguez Quispe , quien en los últimos días confesó haber asesinado y descuartizado a una mujer en Puno. El caso generó verdadera conmoción en Perú y ahora este hombre, luego también de la presentación de pruebas en su contra a manos del Ministerio Público, tendrá que afrontar prisión en un centro de reclusión, establecen medios como RPP Noticias.
Sin embargo, en medio de tanta aberración, y más allá del caso que estremece a Perú en cuanto a sus características, el gesto de un grupo de jóvenes para con el padre del asesino confeso se transformó en “bofetada” a tanto dolor y humillación.
Efectivamente, en la localidad de Juliaca (Puno) los jóvenes no aguantaron lo acontecido con el anciano y salieron a su encuentro para entregarle víveres, ropa y ayuda económica, según reporta por estas horas La República de Perú.
A través de esto lo que buscaron fue llevar un poco de alivio, pues en definitiva el padre no debe por qué cargar con lo que ha hecho su hijo de esta manera y ser cuestionado por lo que hizo con este proceder, pues el responsable de la muerte de la mujer en Puno ya está en manos de la Justicia.
Las imágenes del joven anciano y la mano de misericordia de los jóvenes provenientes de una localidad cercana rápidamente se viralizaron, sorprenden y ayudan a poner uno poco más las cosas en su sitio.
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Con información en base a La República y RPP Noticias