“Por una decisión prepotente” del régimen, gran cantidad de enfermos -niños y ancianos- están impedidos de recibir tratamientos médicos en Cúcuta, denuncia el obispo de San Cristobal. La declaración fue hecha horas antes de un gran apagón que afecta desde hace varias horas a gran parte de Venezuela.
La voz de monseñor Mario Moronta no cesa de exigir la apertura de la frontera entre Colombia y Venezuela, y se permita a quienes habitan la región realizar su vida de una manera normal como siempre lo han hecho. El clamor del obispo de San Cristobal (estado Táchira), se escuchó este Miércoles de Ceniza, aprovechando la presencia de los medios de comunicación, todavía interesados en darle cobertura a la crisis humanitaria que se vive con intensidad en esta zona caliente de América Latina.
Las declaraciones del obispo ocurren horas antes de un apagón masivo -este jueves 7 de marzo- que afecta a varios estados del país y que también ha generado dificultades en la atención, por ejemplo, en hospitales. Lo acontecido en la Maternidad de El Valle, con niños recibiendo recibiendo respiración manual con bomba, es más que elocuente: