90 aniversario de la institución del Estado de la Ciudad del Vaticano (11 de febrero 1929)Los Pactos o Tratado de Letrán del 11 de febrero de 1929 proporcionaron el reconocimiento mutuo entre el entonces Reino de Italia y la Santa Sede. Los Pactos fueron negociados entre el Cardenal y Secretario de Estado Pietro Gasparri en nombre de la Santa Sede y Benito Mussolini, el líder fascista y primer ministro italiano.
Al respecto, un experto del Vaticano disipó una cuestión histórica. El Tratado, acompañado por un Concordato con el régimen fascista, ¿no podía, de todas formas, despertar alguna perplejidad entre los propios católicos y en algún gobierno extranjero?
Curiosidades del Vaticano
Hay muchas cosas del Vaticano que no se conocen. Por ejemplo: 11 hechos que la mayoría de la gente no conoce:
“Es bueno recordar que los tratados se firmaron con un Estado y no con un régimen político en particular. Lo fundamental es la continuidad del Estado a través de la variabilidad de los regímenes políticos”, ilustró el sacerdote Bernard Ardura, O. Praem., Presidente del Comité Pontificio para las Ciencias Históricas en ocasión de la Conferencia de presentación de la Mesa redonda con motivo del XC aniversario (1929-2019).
La presentación a la prensa del encuentro de reflexión histórica sobre los Pactos ha tenido lugar este viernes 8 de febrero en la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
El encuentro organizado por el Comité Pontificio para las Ciencias Históricas tendrá lugar en el Pontificio Colegio Teutónico, en el Vaticano, el 12 de febrero de 2019.
“Así, los Pactos Lateranenses fueron firmados entre la Santa Sede y el Estado italiano y se incorporaron a la Constitución italiana de 1948, cuando Italia decidió pasar de la monarquía a la República”, agregó.
En este sentido, el sacerdote Bernard Ardura, O. Praem elogió la sabiduría de Pío XI, que optó por una “solución que podría definirse “minimalista” en cuanto al territorio del Estado, gracias también a la visión realista del cardenal (Pietro) Gasparri”, entonces Secretario de Estado.
Los Pactos también fueron mérito del cardenal Gasparri (1852-1934) que fue un prelado católico italiano, jurista y diplomático de la Santa Sede. “Los Pactos Lateranenses se firmaron diez años después del último “feo” institucional que sufrió la Santa Sede; a saber, la oposición de Italia a la participación de la Santa Sede en las negociaciones de paz de 1919, para concluir la Primera Guerra Mundial”.
“Noventa años después, incluso si la realización concreta del Estado pudiera ser siempre objeto de discusión y reflexión, todavía hoy la cooperación activa entre la Santa Sede y el Estado italiano, especialmente en estos años de precariedad económica y social y más recientemente de crisis humanitaria, demuestra la bondad de los Pactos de Letrán”, confirmó el experto.
Hay que dar un paso atrás antes de los Pactos, la toma de Roma (20 de septiembre de 1870) fue el evento final del largo proceso de unificación italiana, marcando tanto la derrota final de los Estados Pontificios bajo el papa Pío IX como la unificación de la península italiana. La toma de Roma puso fin al reinado aproximado de 1116 años (754 a 1870 d. C.) de los Estados Pontificios.
En fin estos Pactos garantizaron estabilidad al poder temporal del Papa y abrieron a la posibilidad concreta a la Santa Sede de sentarse a la mesa de las naciones a favor de la paz y de la reconciliación de los hombres. Independencia que es visible actualmente en las representaciones que la Iglesia Católica tiene en instituciones internacionales como las Naciones Unidas, la UNESCO, la Comisión Europea, etc.