El báculo austero usado por el Papa durante la Misa de inicio del Sínodo de los Obispos, dedicado a los Jóvenes, no pasó desapercibido para los ojos atentos.
Francisco llevó en sus manos el báculo de madera que representa a Jesús crucificado con los brazos unidos por un clavo y esculpido en madera con cortes artesanales; casi rústicos, sencillos, de formas apagadas.
Resulta que este báculo es un regalo de los jóvenes italianos que encontraron a Francisco en el Circo Massimo de Roma el pasado 11 de agosto.
Los jóvenes pidieron al Papa de llevar consigo el báculo en el Sínodo de los Jóvenes para sentirse cerca al Sucesor de Pedro y como una forma de conexión espiritual reciproca.
El Papa que celebra su santo, San Francisco de Asís, sigue teniendo gestos sencillos y profundos y, ayer 03 de octubre, presidió una vez más su cercanía a Jesús a y los jóvenes que tanto le preocupa se puedan alejar y caer en manos de mercantes de muerte.
Las mejores imágenes del primer día del Sínodo de los jóvenes (Galería)
Hoy celebramos a...
