Según un nuevo informe del Banco Mundial, en 2016 el mundo produjo 2.010 millones de toneladas de desechos
“Sin una acción urgente, los desperdicios a nivel global aumentarán para 2050 un 70% respecto a los niveles actuales.” Este es el mensaje lanzado por la Banca Mundial en su nuevo informe dedicado al desafío global de la eliminación de residuos, publicado el jueves 20 de septiembre con el título (que es también un juego de palabras) [1] What a Waste 2.0: A Global Snapshot of Solid Waste Management to 2050 [2].
El nuevo documento, de casi 300 páginas de largo (con anexos y tablas), expresa la preocupación por el alarmante aumento de la masa de basura a escala global. “Desechos no recogidos y desechos poco eliminados tienen impactos significativos en la salud y en el medio ambiente. El coste para afrontar estos impactos es muchas veces superior al coste del desarrollo y gestión de sistemas de gestión de basuras simples y adecuados”, advirtió el autor principal del informe, Silpa Kaza.
Algunos datos generales
Según el informe, financiado por el gobierno japonés, que se presenta como la continuación del documento anterior What a Waste: A Global Review of Solid Waste Management (2012), en 2016 el mundo produjo 2.010 millones de toneladas de desechos, una masa destinada a aumentar a 3.400 millones de toneladas hacia la mitad del siglo.
De esta enorme masa, poco más de la tercera parte, el 34% o 683 millones de toneladas, se genera en países de renta alta, aunque constituyen menos de la quinta parte de la población del planeta (el 16%). Sin embargo, recuerda el informe, más de la tercera parte de los desechos de los países ricos se recupera a través de métodos de reciclaje y compostaje.
De los datos recogidos por el Banco Mundial se desprende que cada habitante del planeta genera a diario de media 0,74 kg de basura, con diferencias locales que varían de un mínimo de 0,11 kg a un máximo de 4,54 kg. Mientras que la producción media per capita diaria de desechos urbanos subirá en los países de renta alta en 2059 un 19%, en los países de renta media-baja sin embargo subirá, según el Banco Mundial, un 40% o más.
Recogida y eliminación
Un paso crítico en el ciclo de la gestión de residuos, prosigue el informe, es la fase de recogida de la basura. Los países pobres o de renta baja recogen, por ejemplo, casi la mitad (el 48%) de los desechos urbanos, pero este porcentaje baja a poco más de un cuarto (el 26%) en las zonas rurales. A nivel global, el África subsahariana recoge menos de la mitad de los desperdicios, el 44%, mientras que en las regiones de Europa-Asia central y América septentrional, este porcentaje sube a casi el 90%.
Siempre a nivel global, aproximadamente el 37% de los desperdicios es arrojado en algún tipo de vertedero controlado o landfill, el 33% acaba en vertederos abusivos o no controlados (el llamado dumping), otro 19% es recuperado a través de procesos de reciclaje y compostaje, y el restante 11% es incinerado.
El informe muestra que a nivel global, la categoría más grande de desechos son los desperdicios alimentarios y verdes: los desechos orgánicos constituyen de hecho casi la mitad (el 44%) de la masa total. Otro 38% lo representan los desechos sólidos reciclables, o sea, el plástico [3], el papel y el cartón, el metal (por ejemplo las latas de aluminio) y el vidrio.
Asia Oriental y Pacífico
Esta región del mundo, que alberga a 2.270 millones de habitantes y está compuesta por 37 países, entre ellos Australia y varios Estados insulares del Océano Pacífico, es la que durante 2016 produjo la mayor masa de basura, 468 millones de toneladas, es decir, casi la cuarta parte del total mundial. Mientras que el 46% de la basura termina en vertederos controlados, poco más de la quinta parte se incinera. La incineración está muy difundida en países con poca disponibilidad de tierra, como Japón (el 80%) o Singapur (el 37%).
Si bien la per capita diaria es de 0,56 kg, casi la mitad de los desechos (el 47%) de la región se produce en China. Además de ser el país más populoso del mundo en términos absolutos, el coloso asiático constituye casi dos tercios (el 61%) de la población de toda la región. Sin embargo, la producción de basura per capita diaria en China es inferior a la media regional: 0,43 kg. Este dato refleja, según el informe, la cantidad de desechos muy reducida generada por la “significativa” población rural china.
Europa y Asia central
Los 912 millones de habitantes de la región europea y centro-asiática, constituida por 57 países, entre ellos Groenlandia y la Federación rusa, produjeron en 2016 en total 392 millones de toneladas de desechos, una media diaria de 1,18 kg per capita. En las zonas urbanas de la región, esta cifra es algo superior: 1,28 kg.
Europa y Asia central reciclan y compostan casi la tercera parte (el 31%) de sus desechos, pero según el Banco Mundial, la región tiene un potencial de reciclaje y compostaje mucho más alto: casi de tres cuartos. El porcentaje de los desechos que se recoge en la región es más bien alto: el 90%. Esta proporción baja al 55% a nivel rural, para subir al 96% a nivel urbano.
America Latina y Caribe
En 2016, los 638 millones de habitantes de los 42 países de América Latina y del Caribe produjeron 231 millones de toneladas de basura, una media diaria per capita de 0,99 kg. Aunque la producción de desechos es más alta en los Estados insulares con una elevada actividad turística, las playas de las islas caribeñas se ven invadidas de restos de plástico transportados por mar, recuerda el Banco Mundial.
A nivel urbano, en países como Uruguay y Colombia la cuota de recogida de basura supera el 95%, pero en la capital haitiana Port-au-Prince esta proporción baja incluso al 12%. En lo que respecta a la recogida de basura, el informe del Banco Mundial menciona los llamados waste pickers o recogedores. Mientras que en Cusco, Perú, hay 175, esta cifra sube a 20.000 en São Paulo, Brasil.
Oriente Medio y África septentrional
La región con menor producción de desechos de todo el globo es Oriente Medio y África septentrional. Los aproximadamente 437 millones de habitantes, diseminados por 21 países, de Marruecos a Irán, generaron en 2016 unos 129 millones de toneladas de desechos, o sea, una media de 0,81 kg diaria per capita.
Se prevé, sin embargo, que hacia la mitad del siglo esta cantidad se doblará, advierten los autores del informe. De hecho, en las ciudades de la región, la producción de basura llega ya a una media diaria de 1,38 kg per capita, y en los ricos Estados petrolíferos del Golfo Pérsico, como Bahrein, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait, ya se superan los 1,5 kg per capita. Para contrastar: en Marruecos, Yibuti y Yemen, esta cifra es inferior a 0,6 kg per capita diaria.
América septentrional
Aunque la región de América septentrional — compuesta sólo por tres naciones: las Islas Bermudas, Canadá y EE.UU. — acoge con 359 millones de habitantes menos del 5% de la población mundial, produce con todo el 14% de los desechos del planeta: 289 millones de toneladas, una media diaria de 2,1 kg per capita. Impactan también las divergencias: los habitantes de Seattle, en el estado de Washington, generan de media per capita hasta 3,13 kg de desechos al día, mientras que los de la capital de Canadá, Ottawa, no llegan siquiera a un kilogramo, o sea 0,95 kg.
En la región, aproximadamente una tercera parte de los desechos se recicla, el 12% es incinerado y menos del 1% compostado, pero la situación es muy diversa en las Bermudas. Tratándose de un Estado insular en medio del Océano Atlántico, con una superficie muy reducida (apenas 53,2 km²), se construyó en 1994 una planta incineradora, que recoge el 67% de los desechos.
Asia meridional
Con un total de 334 millones de toneladas de desechos, los casi 1.680 millones de habitantes de Asia meridional, que comprende, además de los gigantes demográficos India, Pakistan y Bangladesh, también países muy pequeños (Bhutan y las Maldivas tienen juntos 1,2 millones de habitantes), producen cada día de media 0,52 kg de desechos. Se trata de una cifra muy baja pero que se doblará hacia la mitad de siglo, según las proyecciones del Banco Mundial.
Mientras que más de la mitad (el 57%) de la basura de la región la constituyen desechos orgánicos, casi tres cuartas partes de la masa total se descargan al abierto, o dumped, o sea, que no se tratan adecuadamente ni se echan a vertederos controlados. No faltan, sin embargo, proyectos destinados a mejorar la situación. En más de 4.000 ciudades y zonas rurales de la India se puso en marcha en 2014 la iniciativa Swachh Bharat Abhiyan (o traducido al español: “Misión India Limpia”). El objetivo era liberar las calles de basura y mejorar la situación higiénico-sanitaria del país.
África subsahariana
La última región es la del África subsahariana. Compuesta por 48 países, entre ellos Nigeria (más de 190 millones de habitantes ) y Etiopía (poco más de 100 millones de habitantes), la región es, con 1.030 millones de habitantes, la que más crece. Según las proyecciones, en 2050 más de la mitad del crecimiento demográfico global sucederá en esta región.
En 2016 el África subsahariana produjo 174 millones de toneladas de desechos (o sea, una media diaria de 0,46 kg per capita), de los que más de dos tercios (el 69% aproximadamente) son vertidos al abierto o dumped. Se prevé que a raíz del aumento de la población y de los estilos de vida menos tradicionales, la masa total de los desechos se triplicaría para el 2050 en la región.
Recogedores de basura
Además de dedicar espacio a varias iniciativas destinadas a reducir “las pérdidas y los desperdicios alimentarios” o FLW (del inglés Food Loss and Waste), entre ellos la ley francesa de 2016 que obliga a los supermercados con una superficie de venta superior a 400 m² que done el alimento no vendido a asociaciones caritativas, y el proyecto BAMX (Bancos de Alimentos de México), el informe se detiene en una figura muy difundida en varias regiones del mundo: los recogedores de basura o waste pickers. En algunas grandes ciudades de América Latina y del Caribe trabajan por ejemplo de media casi 4.000 recicladores.
Como revela el informe, hoy en todo el mundo más de 15 millones de personas se ganan la vida de manera informal como waste pickers. Se trata de una categoría “vulnerable”, compuesta a menudo por mujeres, niños, ancianos, personas en el paro o inmigrantes. En la capital de Laos, Vientiane, y en Cusco, Perú, las mujeres constituyen respectivamente el 50 y el 80% de los recogedores de basura.
Gracias al apostolado de sœur Emmanuelle entre los recogedores de basura en la periferia de El Cairo, el mundo ha tomado conciencia de las dramáticas condiciones de vida de los zabbalin o vendedores traperos. Según el informe, en la capital egipcia, que cuenta ya con 10 millones de habitantes, unos 96.000 recogedores alegales realizan su humilde e infravalorado trabajo, reciclando el 10% de los desechos de la metrópolis.
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1] Waste en inglés significa tanto residuos como la expresión “¡Qué pérdida!”.
2] Para leer el texto completo, entrar en la página que se abre a la izquierda en Download English PDF.
3] Para los problemas ligados al plástico, cfr. Aleteia:
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