Santa Teresita decía: "¡Qué grande es el poder de la oración! Se diría que es una reina que en todo momento tiene acceso directo al rey y puede conseguir todo lo que le pide".
Por eso si quieres tener un buen día no te olvides antes que nada, antes de empezar tus tareas cotidianas, de "conectarte" no con el celular sino con el Rey para ofrecerle tu jornada y pedir por lo que necesites.
Puedes hacerlo con esta oración de Teresa de Lisieux, una santa que despierta devoción en millones de personas en todo el mundo:
Oración
¡Dios mío!
Te ofrezco todas mis acciones de hoy,
según las intenciones del Sagrado Corazón de Jesús,
y sólo para su gloria.
Quiero santificar los latidos de mi corazón,
mis pensamientos y mis obras,
por más insignificantes que sean,
uniéndolos a sus méritos infinitos,
y para reparar mis faltas, arrojándolas en la inmensa
hoguera de su Amor Misericordioso.
¡Oh Dios mío! te pido para mí
y para mis seres queridos,
la gracia de cumplir, con toda perfección,
tu santa voluntad y aceptar,
por tu amor, las alegrías y
las penas de esta vida pasajera,
para que un día estemos reunidos
en el Cielo por toda la eternidad.
Amén!
¿Sabes cómo era santa Teresita del Niño Jesús? ¿Conoces la infancia espiritual que ella vivió?