Se trata de la Virgen del Socavón, una de las más veneradas en Bolivia, en particular en la localidad de Oruro y por los mineros. Fue ahí donde, en la Iglesia del Socavón, se decidió la colocación de un vidrio de seguridad anti-balas con el fin de otorgarle mayor cuidado y conservación.
La instalación de este vidrio, recuerda La Razón, recibe el asesoramiento del Ministerio de Culturas y Turismo de Bolivia, además de la gobernación de Oruro. Pero también la acción es posible gracias a la donación de los devotos, así como otras organizaciones sociales.