Una localidad ecuatoriana que permite revitalizar la fe y degustar fabulosas tortillas La escena se repite domingo tras domingo, el mejor día para visitarla. Es que la localidad San Buenaventura, (provincia de Cotopaxi, Latacunga, Ecuador), ofrece una infinidad de bondades para quien la visite. Nadie puede retirarse del lugar sin al menos visitar el santuario y probar los platos tradicionales ecuatorianos en la plaza central, donde se destacan las tortillas de maíz y los choclos cocinados.
Es que se trata de una localidad ecuatoriana que se ha visto revitalizada por la devoción a San Buenaventura, afamado santo vinculado a Francisco de Asís y hasta con fuerte impronta propia, proclamado doctor de la Iglesia en 1588.
La imagen, de menos de 40 centímetros de alto, llegó al lugar de una zona cercana hace 200 años y tomó el nombre del santo. Actualmente, la popularidad de Buenaventura traspasa fronteras y los domingos son días más que especiales.
El propio párroco del lugar, Óscar Tapia, contó que los domingos la iglesia se llena de fieles que siguen llevando peticiones y agradecimiento.
Pero la explosión de fieles también generó una oportunidad para muchas familias de lugar que desde hace años empezaron a acompañar la movida religiosa con auténticas fiestas gastronómicas para los visitantes. La tortilla de maíz se ha transformado en uno de los platos más esperados.
“Hace 25 años, dos familias lo único que vendían eran tortillas de maíz y de papa. Hoy lo hacen casi todas las familias que rodean la plaza central de la iglesia”, expresó a El Telégrafo de Ecuador Gladys Panchi, una de las tantas pobladoras locales cuyos ingresos en gran parte dependen del movimiento turístico y gastronómico de San Buenaventura.
También se pueden disfrutar otros platos típicos como caldo de gallina, estofado de pollo y res, choclos con queso, entre muchos otros.
Los puestos de venta están ubicados frente a la plaza central. El lugar también se caracteriza por ser un verdadero “huerto” debido a su afamada producción de hortalizas y legumbres que se venden en mercados locales.
La fiesta en honor a San Buenaventura es en el mes de julio, ocasión que da lugar a mayor concentración turísticas, bailes, juegos y comidas típicas, además de las celebraciones religiosas.
Uno de los principales atractivos durante estas festividades tiene que ver con el espectáculo brindado por la comparsa de la Mama Negra.
Pero cada domingo también se vive una verdadera fiesta y de alguna manera gracias a esta masiva presencia de fieles y turistas es posible que la economía local se vea reactivada.