Continúa la estela de premios del cine español, tras los Forqué, que inauguraron la temporada cinematográfica el 11 de enero. El pasado martes, 19 de los corrientes, la prensa especializada los celebró en el Gran Teatro Príncipe Pío, en Madrid, en funcionamiento desde diciembre del año pasado y edificio considerado Bien de Interés Cultural.
Se trataba de los III Premios Feroz -ya han conseguido hacerse un buen hueco entre la prensa al uso- que destacan lo mejor del cine patrio del último año y que ya se conocen como los Globos de Oro españoles, más en las formas que en el fondo.
Negociador, dirigida por Borja Cobeaga, ha sido elegida mejor comedia. Es un tanto llamativa la calificación que se le da al filme de ‘comedia’ cuando la película afronta el conflicto etarra. Por su parte, ha sido considerada mejor película dramática La novia, espléndido homenaje a Federico García Lorca dirigido por la joven aragonesa Paula Ortiz.
Además, la veterana actriz catalana Rosa María Sardà recibió el premio Feroz de Honor por el conjunto de su carrera. La homenajeada acogió su distinción de manos de su hermano Xavier y apeló a la construcción de un cine mejor, confía en que se siga haciendo cine, a pesar de los palos en las ruedas, y agradeció estar viva. Seguramente fue lo mejor de la noche.
Los galardones se entregaron en una divertida a ratos, irónica, mordaz y ácida gala, con guión y dirección de Eva Merseguer, y presentada por la actriz Silvia Abril, esposa de Andreu Buenafuente, bastante deslenguada. Aunque si por algo se caracterizan estos premios es por no tener pelos en la lengua. Abril se insinuó a Mario Casas, compartió chistes de escaso gusto con Penélope Cruz o realizó bromas a costa del pelo de Luis Tosar. ¿La guinda?: “La academia de cine es más española que nunca. ¿Qué hay más español que tener un expresidente imputado?”. Hay que hacer más cine de corrupción. Eso sí, las risas alcanzaron su mejor momento con un vídeo en el que espectadores anónimos criticaban películas sin saber que sus guionistas o directores estaban frente a ellos.
Con seis estatuillas con forma de zorro, La novia, de Paula Ortiz, se proclamó la ganadora absoluta de la tercera edición de los Premios Feroz. La propia Ortiz (directora), Inma Cuesta (actriz) -ambas tuvieron un emocionado recuerdo a su compañero, el actor Carlos Álvarez Novoa, que ha fallecido recientemente-, Luisa Gavasa (actriz de reparto), Shigeru Umebayashi (música), Roberto Bra (tráiler), además de mejor drama, fueron los galardones que la película, adaptación de García Lorca, se llevó a casa. La cinta partía favorita con nueve nominaciones.
Negociador (mejor comedia), Ricardo Darín (Mejor actor por Truman) -paradójicamente el premio lo recogió su compañero Javier Cámara, que celebraba su cumpleaños, en ausencia del actor argentino, candidato en la misma categoría. Mario Casas (mejor actor de reparto), Cesc Gay y Tomás Aragay (mejor guion) y Requisitos para ser una persona normal (mejor cartel) fueron el resto de premiados en una gala en la que hubo tiempo para la reivindicación, el descaro y la mala leche. B, la película sobre Luis Bárcenas, ganó el premio especial al filme que a juicio del jurado merece mejor carrera comercial.
Actores y directores, vistos mil veces, son los que siempre están en la cresta de la ola, sin dejar espacio a nuevas creaciones, a nuevas voces, y hasta que eso no cambie…