Un joven matrimonio catalán vende por Internet artículos con motivos católicos para servir a la «evangelización»
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Con simbología y ecos evangélicos, “The fishermen” (Los pescadores) es una obra de Diego y Lola, pero primeramente de Dios, dicen, que va más allá de vender tazas, chapas, imanes, espejos, abre botellas con imán y otros objetos con iconografía católica, porque “para nosotros —resalta este joven matrimonio barcelonés— es un servicio para la Iglesia, un proyecto destinado a la evangelización, especialmente destinado a los jóvenes, quienes no suelen sentirse identificados con la iconografía clásica y ello conlleva que no dispongan de elementos cristianos en su vida cotidiana».
Profesionales del sector con una larga trayectoria, Diego y Lola, magnifican además en sus productos el diseño y el contenido, como podemos observar en su web que, actualmente, está renovándose para incluir más objetos en su catálogo.
Del mercadillo solidario a personalizar productos
Lo que se concretó hace unos meses en la creación de esta tienda virtual, fue fruto del discernimiento del matrimonio, según reconocen: « La iniciativa de implantarnos en el mercado surgió de improvisto. Nuestros primeros productos fueron elaborados como donativo para el mercadillo anual en el que participa nuestra parroquia para recaudar fondos. Tras esta experiencia, sentimos que debíamos de continuar. Y lo hicimos de manera altruista y exclusiva para nuestra comunidad, hasta que, por Providencia divina, un joven de otra parroquia conoció lo que hacíamos y abrió nuestro horizonte. Ello constituyó la motivación definitiva para construir “The Fishermen”».
Reconocen la buena acogida que han tenido sus propuestas entre personas y organizaciones diversas, porque al tiempo que ofrecen diseños ya realizados con variedad de plantillas adaptadas, están abiertos a abordar otras peticiones de los clientes. De momento, su actividad se ciñe a la zona donde viven, pero, subrayan, que están «estudiando y discerniendo extender nuestro alcance más allá de Barcelona e incluso de España, llegando a otros países europeos y a Latinoamérica, especialmente. Teniendo de nuestro lado a "Quien todo lo puede", si Él quiere, es algo más que factible y realmente emocionante para nosotros. Por otro lado, estamos siempre dispuestos a llegar acuerdos con tiendas físicas y virtuales afines a nuestros principios y objetivos».
Manifestar espontáneamente la fe
Una creatividad explosiva espolea a este matrimonio catalán, tamizada por su discernimiento cotidiano en conocer y acoger la voluntad de Dios. Por ello consideran ampliar la oferta de objetos con los que «ofrecer los contenidos de nuestra fe –afirman- en productos sencillos cuya estética se corresponda con el sentir de nuestra generación y así darles la oportunidad de "vestir" de fe su vida cotidiana».
Misión, evangelización, servicio a la Iglesia católica son elementos definitorios de la vida y acción de Diego y Lola, como aluden reiteradamente con una sencillez sin pretensiones: «Los católicos hemos de tomar conciencia que somos la luz de una sociedad cuya fe, al haber renegado de Dios, ha quedado ensombrecida. Como portadores de la luz misma que es Cristo, no podemos ni debemos mantenerla escondida por más tiempo. Por ello, no se trata tanto de hacer visible nuestra fe como signo de nuestra alegría por ser cristianos, sino, más bien, de hacer visible nuestra fe, de forma espontánea y natural, para que esta sea semilla de conversión para quienes nos rodean».
“Pescados” por Jesús
La mutación a la que aluden Diego y Lola es el ambiente natural en el que un cristiano necesita moverse para que emerja la figura del Dios en él, ya que otra postura es infértil e ideológica. Por eso, ambos recuerdan la suya que "daría para un libro", dicen, y por la que iniciaron "un proceso de conversión después de un encuentro personal con Jesús".
"Desde ese instante siempre hemos tenido el deseo de servir a Dios de alguna manera, de transmitir el tesoro que hemos recibido a los demás, de compartir el gozo de haber encontrado a Jesús. “The Fishermen”, los pescadores en castellano, parece ser una respuesta a ese deseo. Aunque, si te somos sinceros, empezamos a creer que el Señor quiso ese nombre porque Él y su Madre son los pescadores y nosotros, y lo que hacemos, sus instrumento".
Más información thefishermen.es