Caritas, la Conferencia Episcopal Española y la Confederación de Religiosos acaba de hacer público un comunicado en el que recuerdan el 25 aniversario de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niños y muestran su preocupación por “la pobreza generalizada, que alcanza hoy a tantas familias españolas, y que adquiere en la vida real rostros muy concretos, como son los niños y niñas que sufren la crisis social y económica de nuestro país”.
“En España uno de cada tres niños viven en riesgo de pobreza o exclusión social”, explican en el comunicado y denuncian los recortes presupuestarios en educación que “han dejado sin becas a 700.000 estudiantes” así como los recortes en algunas comunidades autónomas: “las ayudas para apoyar a las familias en materias como libros o becas de comedor han sufrido serias reducciones”.
En el comunicado recuerdan las palabras del Papa Francisco: “La necesidad de resolver las causas estructurales de la pobreza no puede esperar, no sólo por una exigencia pragmática de obtener resultados y de ordenar la sociedad, sino para sanarla de una enfermedad que la vuelve frágil e indigna y que sólo podrá llevarla a nuevas crisis. Los planes asistenciales, que atienden ciertas urgencias, sólo deberían pensarse como respuestas pasajeras…” (E.G. 202)
“Sentimos la responsabilidad moral y apelamos a las Administraciones públicas, para construir las bases de un nuevo modelo social y económico centrado en las personas, especialmente los más vulnerables, como la infancia y juventud, y articular políticas orientadas a promover los derechos humanos y la justicia social”, afirma la Iglesia Española solicitando un Pacto de Estado por la infancia que consiga “erradicar la pobreza infantil” y establezca “las medidas necesarias para la inclusión social de la infancia”.