Cuando sale de un país visitado, el Papa Francisco suele subir a un avión fletado por una compañía aérea local. La compañía de Timor Oriental, Aero Dili, fue la encargada de esta misión para que el pontífice pudiera llegar a su próximo destino, Singapur, tras cuatro horas de vuelo. A bordo, cada pasajero - en particular los periodistas que seguían al Pontífice - encontró en el pequeño bolsillo situado en el respaldo de los asientos la inevitable hoja de cartón que explicaba las instrucciones de seguridad en caso de incidente - aterrizaje violento, despresurización de la cabina, etc. -. Pero, muy inesperadamente, se deslizó otro documento titulado "Invocación".
Esta hoja, de formato idéntico a las normas de seguridad, ofrece en su reverso seis breves oraciones para quienes se disponen a embarcar. Están dirigidas a los fieles de las seis religiones mayoritarias en la región que rodea Timor Oriental: el catolicismo (98% de la población de Timor Oriental), el islam (religión mayoritaria en la vecina Indonesia), el protestantismo (muy presente en el norte de Sulawesi, por ejemplo), el hinduismo (en Bali), el budismo (religión número uno en Singapur) y el confucianismo, presente en todos estos países debido a la fuerte presencia de una diáspora china.
Seguridad "espiritual"
Hay dos razones que explican el cuidado de esta empresa timorense: la primera es que Aero Dili forma parte de la promoción cultural de la tolerancia religiosa que lleva a cabo el país, plenamente alineado con la Santa Sede en esta cuestión; la segunda es un claro deseo de la élite timorense de mantener buenas relaciones con la Indonesia musulmana, antiguo ocupante que se ha convertido en un socio clave y en uno de los países más comprometidos con el diálogo interreligioso.
En términos de "seguridad espiritual", la compañía aérea timorense puede enorgullecerse de haber sido más diligente que Garuda Indonesia. El único audiolibro religioso ofrecido a bordo de la compañía aérea que se encargó del vuelo pontificio entre Yakarta y Port Moresby era el Corán.
Esta es la oración propuesta para los católicos:
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Te pedimos: danos un viaje seguro, con un agradable y buen tiempo. Danos a tus santos ángeles como guías, para que nos conduzcan tranquilamente a nuestro destino. También te pedimos que veles por nuestras familias, por los que hemos dejado atrás, consuélalos y dales paz, por favor, hasta que podamos volver a verlos. Bendito sea tu nombre, ahora y siempre. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Cuando el avión del Papa Francisco llegó a Singapur, el sobrecargo jefe pronunció un mensaje para subrayar el carácter "histórico" del vuelo para su compañía aérea y dio las gracias con gran diligencia al Papa, a los cardenales y a los obispos a bordo.