Los católicos del Líbano se alegraron el 2 de agosto de 2024, cuando la Iglesia celebró la beatificación de Esteban Douaihy, patriarca del siglo XVII de la Iglesia maronita, en una liturgia que parecía de otro mundo, sobre todo teniendo en cuenta las crecientes tensiones en el país.
El Papa Francisco reconoció el 14 de marzo un milagro atribuido a la intercesión del beato Esteban, abriendo el camino a su beatificación.
El patriarca El Douaihy vivió entre 1630 y 1704 y tuvo un gran impacto en la historia y el desarrollo de la Iglesia maronita, una Iglesia católica oriental con sede en el Líbano y en comunión con el Papa.
Fue patriarca de la Iglesia maronita durante más de 30 años, desde 1670 hasta su muerte, y tenía fama de ser extremadamente inteligente; escribió importantes textos sobre la historia de la Iglesia, la liturgia y otros temas. Por ello se le considera un faro de la unidad de la Iglesia, así como un modelo de la alianza fe-ciencia, considerado "único en su época en conocimiento y santidad", señala el postulador de su causa, el padre Paul Azzi.
Sufrió una gran persecución durante su época de patriarca, pero trabajó para reconciliar a las sectas enfrentadas, "fomentando un espíritu de armonía entre ellas y promoviendo el concepto de coexistencia entre los componentes del Líbano, siendo el pionero en su visión del futuro del Líbano", dijo el sacerdote.
La liturgia y la ceremonia de beatificación tuvieron lugar a unos 30 minutos al norte de Beirut, en Bkerké, sede patriarcal de los maronitas. Fue celebrada por el Cardenal Marcello Semeraro, Prefecto del Dicasterio Vaticano para las Causas de los Santos, junto con el Patriarca maronita Cardenal Mar Bechara Boutros Al-Rahi.
Una multitud, entre la que se contaban líderes políticos, diplomáticos y espirituales, así como fieles, se congregó en Bkerke, portando imágenes del patriarca beato y rezando por el Líbano a la luz de las velas.
Dios pasó por Ehden
El padre Azzi calificó la beatificación de "celebración extraordinaria".
Esteban Douaihy nació en Ehden en la fiesta del Papa san Esteban, el 2 de agosto de 1630, hijo del diácono Michael Douaihy y de Mary Douaihy. Le pusieron el nombre de Esteban en honor de San Esteban; y ahora, 394 años después de su nacimiento, es esta fecha la elegida para su reconocimiento como Beato.
Está prevista una Misa de acción de gracias el 3 de agosto en Ehden, lugar de nacimiento del Patriarca, a unos 80 kilómetros al norte.
"En efecto, es cierto que 'por donde pasa Dios, pasan los santos'. Sí, es como si Dios pasara por Ehden y eligiera a Esteban Douaihy, que perdió a su padre a los tres años, para crecer como huérfano y convertirse en el que hoy celebramos: 2 de agosto de 2024, un don celestial que esperamos desde hace más de 394 años, que nos llega como gracia divina en tiempos difíciles", dijo el padre Azzi.
El milagro para su beatificación
En la Iglesia Católica, para que una persona sea beatificada, es necesario que se atribuya un milagro a su intercesión. Si después se reconoce un segundo milagro, el beato puede ser canonizado como santo.
El milagro que el Vaticano examinó para el Patriarca El Douaihy ocurrió en 2013, cuando una mujer (Rosette Douaihy, en la foto de abajo) se curó milagrosamente de una grave enfermedad. Padecía una enfermedad que provoca dolor e hinchazón en las articulaciones llamada poliartritis seronegativa y le habían dicho que no tenía cura.
Fue con su familia a Ehden, lugar de nacimiento del Patriarca, para rezar por su curación. Allí bebió un café con un poco de tierra de debajo de su estatua, costumbre habitual en Líbano en los lugares donde han estado los santos, y se curó milagrosamente de su enfermedad.
El Papa Francisco aprobó el 14 de marzo un decreto del Dicasterio para las Causas de los Santos en el que se reconocía este milagro, permitiendo así la beatificación oficial del patriarca. Ahora que se ha celebrado la ceremonia, se le ha concedido su onomástica como fiesta, el 2 de agosto, y los fieles pueden seguir rezando por su intercesión.
El Beato Patriarca El Douaihy se une a un grupo de importantes santos y santas maronitas, como san Charbel, san Marón, San Rafqa y el Beato Hermano Estfan Nehmé.