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Diferentes ciclos de sueño. Dormir ente 7 y 9 horas seguidas, a lo que estamos acostumbrados hoy, responde al nombre de sueño monofásico, es decir se hace todo de una vez. Pero si lo separamos en dos o más partes pasa a denominarse sueño bifásico. Si además, estos tramos se separan entre el día y la noche hablaríamos de sueño polifásico. Un modelo que es el que siguen los animales, reparten las horas de sueño diario en pequeños periodos de tiempo.
Así dormían nuestros antepasados
Dormir de forma continuada es algo relativamente nuevo. Se hace sólo desde hace 300 años. Antiguamente, el tiempo de sueño se desarrollaba en un lapso de 12 horas . Comenzaban con 3 o 4 horas de sueño, seguidas de 2 o 3 de vigilia y después dormían hasta el alba.
Durante este tiempo de vigilia la gente estaba bastante activa. Se levantaban, iban al baño, fumaban o incluso visitaban a los vecinos. Otros se quedaban despiertos en la cama, leían , escribían o rezaban. Algo habitual entre los religiosos que hacían turnos de vela al Santísimo. De hecho se han encontrado manuales de oraciones del siglo XV que ofrecían plegarias especiales para las horas de vigilia. Incluso en tiempo de la Reforma y la Contrarreforma, protestantes y católicos se acostumbraron a celebrar misas secretas durante la noche durante periodos de persecución.
Sueño bifásico
Aunque nos resulte extraño este tipo de sueño es el que nos pide la naturaleza. Así lo muestra un experimento realizado por el psiquiatra Thomas Wehr en que puso a un grupo de adultos durante 14 horas al día a plena oscuridad. Estas personas tuvieron que regular su nuevo ritmo biológico y establecer sus horas de descanso. Tardaron 4 semanas en hacerlo y lo curioso fue que lo hicieron partiendo el sueño. Dormían primero 4 horas, se despertaban durante unas 2 horas y después volvían a dormir otras 4.
Un hábito descubierto también por el historiador Roger Ekirch, de la Universidad Virginia Tech, en la que encontró evidencias de que los humanos en la Antigüedad dormían en dos turnos de 4 horas. Referencias de patrones de sueño que aparecen en diarios, libros de medicina, notas de tribunales o incluso en La Odisea de Homero.
¿Por qué dormimos por la noche?
Esos turnos en los que dormían nuestros antepasados evolucionaron con la llegada del alumbrado. Hasta entonces, la noche se asociaba a gente con mala reputación, algo que cambió con la iluminación de las calles. Entonces, las clases humildes comenzaron a hacer cosas también de noche. De esta forma ya no había prestigio social ni valor en estar despierto durante la noche. Era algo que podían hacer todos y que provocó que durante la noche se retiraran a casa a descansar.
¿Se podría implantar el sueño bifásico?
Un trabajo publicado en 2014 lo intentó. Un grupo de voluntarios descansó cada día en dos turnos de 5 horas divididas entre la noche y la siesta. Su productividad se comparó con la de otros que durmieron 10 horas por la noche. La conclusión fue que no había apenas diferencia a la hora de desarrollar su trabajo.
Problemas de sueño
Se calcula que casi la mitad de la población tiene problemas de sueño. Algunos médicos lo achacan precisamente a esto, a que muchas de estas personas no se han adaptado bien a dormir 8 horas seguidas. Creen que muchos de los problemas de insomnio tiene sus raíces en la preferencia del cuerpo humano por segmentar el sueño como hacían hace cientos de años nuestros antepasados.