Conoce el significado espiritual de las piñatas mexicanas

Las posadas son una maravillosa costumbre en la cultura latina que ha permanecido vigente durante años. También se les llama "novena de navidad" porque duran 9 días exactamente: comienzan el 16 de diciembre y terminan el 24. Quizá lo más característico de esta tradición son las piñatas; pero no cualquier piñata, sino una tradicional de siete picos, rellena de colaciones, dulces, frutas y cacahuates.

Conoce el origen y el significado en este artículo.

Aunque las piñatas tienen su origen en la cultura china, las tradicionales piñatas mexicanas fueron creadas por los frailes misioneros con el objetivo de continuar con la evangelización e ilustrar la lucha del bien contra el mal.

Los agustinos las introdujeron en las "Misas de aguinaldo", que hoy conocemos como posadas, y les imprimieron los siguientes significados a cada uno de sus elementos:

La piñata está hecha con una olla de barro que, para decorarla, se cubre con papel de colores radiantes, vistosos y llamativos. Esto representa el mal, que siempre se nos presenta como algo deslumbrante y apetecible para así someternos y que caigamos en la tentación.

Los siete picos representan los siete pecados capitales. Es decir, los vicios o debilidades a los que más inclinación tenemos como personas: soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza y que al caer en ellos nos separamos de Dios.

Pegarle a la piñata con los ojos cerrados representa la virtud de la fe, -la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve- que nos permite creer en la promesa de Dios sin tener que ver más que con los ojos del alma.

El palo representa la fuerza de las virtudes para romper con todas esas inclinaciones que nos pueden separar de Dios. Las virtudes que nos permitirán descubrir los frutos que hay dentro de la piñata y que representan las gracias de Dios son: humildad, generosidad, castidad, paciencia, templanza, caridad y diligencia.

Estas virtudes son lo contrario a los pecados capitales representados en los siete picos.

El relleno de la piñata representa el amor de Dios porque, al acabar con el mal -al haberle pegado con el palo, destruyendo toda la piñata y sus picos- obtenemos todos los regalos prometidos por Dios, dones tan anhelados por nuestra alma.

Así que, ahora que comienzan las posadas, conviene preguntarnos: ¿con que vicio estoy dispuesto a romper y así prepararme mejor para esta Navidad?

Recuerda que cuentas con la ayuda de Dios si así se lo permites.