Me encanta ver el gusto con el que lee mi mediana. Esta mañana ha decidido volver a coger “La lección de August” y mientras esperábamos el autobús para ir al colegio le leía en voz alta a su hermana pequeña.
Sara escuchaba atenta y yo he atacado: “Como eres una chica lista tú también serás una gran lectora. Bueno, ya lo eres”.
Eso también es estimulación a la lectura ¿no?
La conversación ha continuado hablando de deseos.
“Cuando sea mayor me encantaría vivir en una casa con una biblioteca gigante”, ha dicho Irene.
“Pues yo me pido vivir en un Reino porque ahí siempre hay bibliotecas”
En casa hay bastantes libros, pero visto lo visto no son suficientes.
Me ha encantado la conversación. Y sobre todo, esa imagen romántica de las bibliotecas, que yo también comparto.
Siempre me han gustado. No solo para estudiar o leer; también para relajarme.
Y desde que tengo hijos, intento ir con ellos siempre que puedo porque además del contacto puro y duro con libros de todo tipo, aprenden a estar en silencio o a hablar más bajo.
Es un ambiente que transmite tranquilidad.
Ser niño no va unido necesariamente a estar pasado de rosca todo el tiempo. Hay peques que disfrutan de ambientes más pausados. Y esto es algo bueno.
Con el curso los niños tienen que alternar las lecturas que deben leer por obligación con las que pueden hacer por gusto. Y para estas últimas estamos intentando encontrar títulos con los que podamos dirfrutar los cuatro mayores. No solo por economizar gastos. Sino porque, tal y como nos pasó como La lección de August, cuando un libro lo lee toda la familia adquiere un significado especial para todos. Y pasa a ser tema recurrente en las sobremesas y conversaciones de casa.
Alessandro D’Avenia ha estado recientemente en España para presentar su última novela, “Lo que el infierno no es”, y por lo que voy conociendo de su obra creo que va a ser un escritor que dejará huella en casa. A los que os proponéis el complicado objetivo de buscar lecturas para miembros de la familia de distintas edades, os lo recomiendo. @amparolatre