Desde pequeños nos enfrentamos a retos distintos y cuando un hijo se preocupa, especialmente si es un niño o un adolescente, es importante que como padres puedan abordarlo con comprensión, apoyo y calma. Las preocupaciones pueden ser sobre diferentes aspectos, como la escuela, las relaciones con amigos, la familia, o incluso miedos internos.
Los padres, un refugio seguro
Los padres son un pilar fundamental en el desarrollo del pequeño. Forman un refugio para él, de modo que la presencia de los cuidadores hará la diferencia para que un niño sepa sobrellevar aquellas situaciones que le preocupan. Aquí hay algunas maneras de ayudar y cómo reaccionar:
1Pasa tiempo de calidad con ellos
![family](https://wp.es.aleteia.org/wp-content/uploads/sites/7/2024/12/shutterstock_2479969155.jpg?resize=620,413&q=75)
Si quieres notar los cambios en la personalidad de tus hijos, así como darles la confianza para que se acerquen a platicar contigo, es necesario pasar tiempo con ellos, solo así los conoceremos mejor y además tendrán la confianza de compartir qué es aquello que les preocupa.
2Escucha activamente
La primera y más importante forma de ayudar es simplemente escuchar. Permítele expresar lo que le preocupa sin interrumpir ni minimizar sus sentimientos. A veces, solo necesitan sentirse escuchados para aliviar parte de su ansiedad. Usa frases como:
- "Entiendo que te sientas así".
- "¿Puedes contarme más sobre lo que te preocupa?"
- "Estoy aquí para ayudarte".
3Valida sus emociones
Muchas veces, los niños no tienen la suficiente confianza para compartir sus sentimientos, debido a que los padres pueden regañarlos o simplemente no darle importancia a la situación que están afrontando.
Sin embargo, es vital que se sienta comprendido. Aunque sus preocupaciones puedan parecer pequeñas o irracionales para los adultos, para ellos son importantes. Valida sus sentimientos diciendo algo como:
- "Es normal sentirse preocupado a veces".
- "Lo que estás sintiendo es válido, todos pasamos por momentos difíciles".
![(VIDEO) 3 formas sencillas de identificar tus emociones](https://wp.es.aleteia.org/wp-content/uploads/sites/7/2024/04/Portadas_videos_15.jpg?resize=300,150&q=75)
4Ayúdale a identificar la causa de la preocupación
A veces, las preocupaciones son vagas o confusas, y el niño o adolescente puede no saber exactamente qué le genera ansiedad. Ayúdale a desglosar lo que les está afectando:
- "¿Qué es lo que te preocupa más de esto?"
- "¿Qué crees que pasaría si…?"
Esto les permitirá ver con mayor claridad lo que está detrás de su ansiedad y tener una mejor perspectiva.
5Proporciónale herramientas para afrontar el estrés
![kids](https://wp.es.aleteia.org/wp-content/uploads/sites/7/2018/10/shutterstock_2434155771.jpg?resize=620,413&q=75)
Ayudar a tu hijo a identificar maneras saludables de manejar la preocupación es clave. Algunas estrategias que podrías sugerir para llevarlo a cabo son:
- Respiración profunda: Enseñarles a tomar respiraciones lentas y profundas para calmarse.
- Ejercicio físico: Salir a caminar o hacer algún deporte puede ayudar a liberar tensiones.
- Distracción positiva: Hacer alguna actividad que disfruten, como leer, pintar, escuchar música, etc.
Así, tu hijo se sentirá más seguro y tendrá las herramientas necesarias para afrontar esos momentos de preocupación.
Por otro lado, debes saber que si los miedos persisten generando un trastorno de ansiedad, es necesario solicitar ayuda profesional que pueda acompañar a tu hijo.
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