Antes de elegir un santo intercesor, es crucial entender tus propias fortalezas y debilidades. Reflexiona sobre tus valores y objetivos, las necesidades emocionales y espirituales que ahora tienes. También los hábitos y actitudes que quieres cambiar.
Trata de encontrar a un santo que haya vivido experiencias similares a las tuyas. Con el que compartas tus valores y virtudes. Principalmente que haya superado algunos de los desafíos similares a los que actualmente enfrentas y las virtudes que quieres tener en tu vida.
El autoconocimiento
Si te identificas con la sencillez, san Francisco es una buena opción, y si te reconoces como líder te podrá inspirar más san Juan Pablo II; en cambio, si te atrae la poesía, tal vez te identifiques con san Juan de la Cruz. Si te sientes movido por la caridad, la madre Teresa de Calcuta, por su vida y obra, será un ejemplo para ti.
Al entender tus fortalezas y debilidades podrás elegir un santo que te ayude a crecer y a mejorar en muchas de tus áreas más frágiles y vulnerables. Recuerda que este viaje es continuo y que Dios está siempre dispuesto a guiarte. Al menos inténtalo.
Muchos santos han pasado por las mismas circunstancias que nosotros, por lo que seguro encontrarás a tu santo intercesor.
Beneficios de orar con los santos:
- Ayuda espiritual en momentos de necesidad
- Guía y consejo en la fe
- Fortalecimiento en la oración
- Unión con la Iglesia en la tierra y el cielo
Te compartimos estos puntos para que identifiques de manera sencilla tu santo intercesor de acuerdo a tu situación actual.
1Identifica tu necesidad
Reflexiona sobre tu situación específica y qué tipo de ayuda necesitas (salud, trabajo, matrimonio, hijos, fe, etc.).
2Busca santos patronos
Cada santo tiene un patronato específico. Por ejemplo:
-San José para la familia y el trabajo.
- Santa Lucía para la vista y la salud.
-San Antonio de Padua para encontrar objetos perdidos.
3Considera la vida y obra del santo
Elige un santo que haya vivido experiencias similares a las tuyas o que haya demostrado virtudes que deseas cultivar.
4Doctores de la Iglesia
Los doctores de la Iglesia son conocidos por su sabiduría y enseñanzas. Algunos ejemplos:
- San Agustín para la fe y la esperanza.
- Santo Tomás de Aquino para la filosofía y la teología.
- Santa Teresa de Ávila para la vida espiritual.
5Santuarios y devociones locales
Investiga los santos y devociones populares en tu región o país. Siempre hay uno cerca de ti.
6Pide guía
Esto lo lograrás en oración. Reflexiona sobre qué santo o Doctor te llama la atención, ya sea por su vida, sus escritos o circunstancias.
7Lectura espiritual
Lee sobre la vida y obra de los santos para inspirarte y encontrar similitudes.
Una vez que sientas identificación con alguno de ellos, se trata de mantener un estrecho vínculo con él o ella; mirar con detenimiento su vida pues ha vivido y superado las dificultades de este mundo. Eso te inspirará la fuerza necesaria para que tú también cultives las virtudes necesarias para ser una mejor persona cada día.
Eso celebramos en la comunión de los santos, una unión más consciente con los que nos han precedido y han alcanzado la gloria en el amor de Dios en esta vida. Ver de cerca sus vidas te recordará que tú también lo puedes lograr.