Notre-Dame recupera su esplendor día a día. A principios de junio, un extraño ballet de grullas sacudió el cielo de París.
Las primeras cuatro cerchas del armazón se izaron hasta la parte superior de la catedral, marcando el renacimiento de su techo. Estas son las llamadas granjas “periféricas”, explica el establecimiento público “Rebâtir Notre-Dame”, que rodeará el muñón de la aguja y lo conectará con el ático de la nave, el coro y el crucero.
En abril se colocó la base de la aguja. Durante el verano, los vanos del entramado, que actualmente se ensamblan en el taller encargado de su reconstrucción, se ensamblarán a su vez sobre las bóvedas de Notre-Dame de París.
Gran avance para este vasto proyecto de reconstrucción de la catedral, muy dañada tras el trágico incendio de 2019. El ritmo de su restauración parece ir a buen ritmo, dejando entrever ahora su reapertura en la fecha prevista, en diciembre de 2024.
En imágenes: descubre la operación de montaje de las cerchas estructurales
Hoy celebramos a...