"Me ha entristecido mucho la noticia que llega de Nicaragua y no puedo dejar de recordar aquí con preocupación al Obispo de Matagalpa, Mons. Rolando Álvarez, a quien tanto quiero, condenado a 26 años de prisión, y también a las personas que fueron deportadas en la Estados Unidos", afirmaba Papa Francisco tras el rezo del ángelus.
"Rezo por ellos y por todos los que sufren en esa querida nación, y pido vuestras oraciones. Pidamos también al Señor, por intercesión de la Inmaculada Virgen María, que abra el corazón de los líderes políticos y de todos los ciudadanos a la búsqueda sincera de la paz, que nace de la verdad, la justicia, la libertad y el amor y se logra mediante el ejercicio paciente de dialogo Oremos juntos a Nuestra Señora".
Tras estas palabras los asistentes al Ángelus en la Plaza de San Pedro rezaron un Ave María con esta intención y por la ayuda a los daminificados por el terremoto en Siria y Turquía y la guerra de Ucrania.
De todos ellos también se acordó el Papa Francisco en el rezo del Ángelus: "Seguimos estando cerca, con oración y apoyo concreto, de las poblaciones afectadas por el terremoto en Siria y Turquía. Estuve viendo en el programa "A Su Imagen", las imágenes de esta catástrofe, el dolor de estos pueblos que están sufriendo por el terremoto. Oremos por ellos, no lo olvidemos, oremos y pensemos en lo que podemos hacer por ellos. Y no olvidemos la atormentada Ucrania: que el Señor abra caminos de paz y dé a los responsables el coraje de seguirlos".