Miguel Obando Cortedano, encargado de medios de la Diócesis de Matagalpa, y Wilberto Artola, camarógrafo de TV Merced, fueron «secuestrados» por el régimen encabezado por Daniel Ortega y Rosario Murillo el pasado domingo 11 de diciembre.
«Se sabe que él (Obando) estaba saliendo de su casa con su cuñado y a los dos se los llevaron», confirmó una fuente al medio digital Mosaico CSI. Luego trascendió que su cuñado presuntamente fue liberado poco después.
Sin embargo, tal cual prosiguió ese medio, se desconocía si Obando, egresado de la Universidad Católica Juan Pablo II y quien solía acompañar en las giras pastorales a Álvarez (bajo «arresto domiciliario» desde hace casi cuatro meses), había sido llevado a la unidad departamental de la Policía en Matagalpa o a otro sitio.
Con respecto, a Artola, su «secuestro» se dio en horas de la noche. Otros medios locales como Confidencial agregaron que la Policía anduvo buscando a otros exempleados de los medios de comunicación de la diócesis que fueron clausurados en diversos momentos por el régimen de Ortega.
El pronunciamiento de periodistas independientes
Las recientes detenciones de estos dos periodistas vinculados a la Diócesis de Matagalpa fueron denunciadas por la organización Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN).
«Exigimos la liberación inmediata de los colegas y el cese de la persecución y hostigamiento estatal en contra de periodistas independientes. Ninguna sociedad recupera la democracia sobre la base del silencio impuesto, silenciando periodistas no se silencia la verdad», publicó la organización este 12 de diciembre a través de sus redes sociales.
En tanto, este nuevo golpe a la Diócesis de Matagalpa no hace más que confirmar el aumento del hostigamiento del régimen hacia la Iglesia, instancia que redobla la oración por los sacerdotes y laicos encarcelados (como quienes acompañaban a Álvarez al momento en que fue detenido allá por el mes de agosto).