Este martes 4 de octubre se cumplieron dos meses del comienzo del encierro del obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, junto a un grupo de sacerdotes, seminaristas y laicos, en la sede de la curia episcopal.
Pasaron 16 días de esa situación de asedio y finalmente, en la madrugada del 19 de agosto, Álvarez fue puesto bajo «resguardo domiciliar». Pero quienes lo acompañaban, algunos liberados de manera previa, fueron derivados al centro de detención conocido como el nuevo Chipote.
Durante este tiempo, en medio de intensos llamados a nivel internacional con respecto a la situación de Álvarez y el resto de colaboradores, lo acontecido con el obispo de Matagalpa ha generado máxima preocupación. Esto, por ejemplo, porque se sabe sobre su estado de salud.
Pero también ha generado expectativa lo que pudiera suceder con las personas que estaban Junto a Álvarez. A estas personas, tal cual informan medios como Confidencial, el régimen encabezado por Daniel Ortega les inició un proceso judicial sin especificación de cargos hace 13 días.
Acusación
Sin embargo, en las últimas horas trascendió de parte del Poder Judicial que las personas detenidas junto a Álvarez fueron acusadas por supuesta «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional». También por «propagación de noticias falsas».
Entre los acusados se encuentran Ramiro Tijerino Chávez, rector general de la universidad Juan Pablo II; José Luis Díaz Cruz, vicario de la Catedral de Matagalpa y también su antecesor Sadiel Antonio Eugarrios Cano. Lo propio con respecto al diácono Raúl Antonio Vega, además de los seminaristas Darvin Leiva Mendoza y Melkin Centeno. Entre ellos había también un reportero gráfico de nombre Sergio Cadena Flores.
Según añade Confidencial, los fiscales del régimen de Ortega todavía no habían presentado una acusación contra Álvarez. El obispo fue señalado por la Policía por «organizar grupos violentos» y «fomentar el odio».
Mientras esto sucede -con asignación de defensores públicos, continuidad de investigación y ratificación de medida cautelar de prisión preventiva-, desde la diócesis de Matagalpa se encomendó este 5 de octubre a Santa Faustina, vidente de Jesús de la Divina Misericordia, a los sacerdotes y laicos que acompañaban a Álvarez.
Corte IDH ordena liberación de 45 presos políticos
Los episodios vinculados a Álvarez, sacerdotes y laicos acontecen en medio de una dura persecución a miembros de la Iglesia de parte del régimen de Ortega en Nicaragua, quien en los últimos días acusó de «dictadura perfecta a la Iglesia».
Todo esto en medio de episodios que han agudizado la mirada sobre Nicaragua a nivel internacional. Entre ellos la salida del país en marzo del nuncio apostólico Waldemar Sommertag. La propia expulsión de las Misioneras de la Caridad de la Madre Teresa de Calcuta en julio. Similar la prohibición de famosas procesiones religiosas (Virgen de Fátima, San Miguel Arcángel y San Jerónimo, entre otras).
Pero el accionar del régimen también ha tenido impacto en los últimos años en cuanto a los derechos humanos. En ese sentido, recientemente la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) adoptó «medidas provisionales en favor de 45 personas privadas de libertad» en ocho centros de detención en Nicaragua. Lo hizo «ante la situación de riesgo que se encuentran sus derechos a la vida, integridad personal, salud y alimentación».
«En su resolución, el Tribunal requirió al Estado que proceda a la liberación inmediata de este grupo de personas», se agregó en el comunicado emitido por el organismo (ver completo aquí).