Sucedió hace unos días al comienzo de uno de los partidos que más rivalidad y pasiones suscita dentro del campeonato italiano, nada más y nada menos que el choque entre el Inter de Milán y el Juventus de Turín.
Al margen de las diferencias en el terreno de juego, ambos equipos y también los aficionados demostraron su apoyo y respeto hacia la tragedia que está viviendo el pueblo ucraniano. Antes del saque inicial, se entonó un tema que, curiosamente, el régimen comunista soviético vetó durante años. Se trata de la canción “Imagine” de John Lennon.
La artista ítalo-brasileña Gaia y la cantante ucraniana Kateryna Pavlenko, líder del grupo Go_A, cantaron contra las atrocidades de la invasión rusa en Ucrania. La intérprete ucraniana había logrado abandonar su país huyendo en tren a través de la frontera polaca.
El estadio Allianz de Turín enmudeció al comenzar el tema que ambas artistas defendieron añadiendo su toque personal. Las luces se apagaron y un gran foco iluminó a las intérpretes. La cantante italiana tomó de la mano con ternura a la ucraniana a la que en ocasiones le temblaba la voz durante la actuación. Los jugadores de ambos equipos, unidos, escucharon de pie el famoso tema de Lennon, emblema del deseo de paz desde hace décadas. De hecho, la propia Kateryna confesó después que, aunque había escuchado cientos de veces la canción Lennon, solo ahora había podido comprender realmente su significado.
Como muchos campeonatos de fútbol, el italiano también puede verse en todo el mundo. Según recogen varios medios, el canal ruso que ofrecía la retransmisión del encuentro, cortó súbitamente la imagen para poner publicidad. A continuación, volvió a emitir el directo desde el estadio, pero sin audio.
Durante el tema, uno de los jugadores se conmovió especialmente porque la masacre contra los ucranianos provocada por Putin le toca de lleno. La esposa del guardameta polaco de la Juventus, Wojciech Szczesny, es ucraniana.
El deportista en sus redes sociales había declarado que estaba dispuesto a perderse el próximo mundial si la FIFA permitía jugar al combinado ruso. Uno de sus mensajes en Instagram reza así: “Mi esposa Marina nació en Ucrania, por las venas de mi hijo corre sangre ucraniana y parte de nuestra familia todavía está en Ucrania. Ver el sufrimiento en sus rostros y el miedo por su país me hace darme cuenta de que no puedo quedarme quieto como si no pasara nada”.
Kateryna, por su parte, es uno de los millones de ucranianos que se han visto obligados a dejar su país a causa de la invasión rusa. Pero hace menos de un año, cuando su vida era normal, recorría Europa por un motivo muy distinto.
Su grupo, Go_A, representó a Ucrania en el famoso festival de Eurovisión que estuvieron a punto de vencer. Lograron el quinto puesto en la votación final, pero el segundo en la votación del público. Ahora Pavlenko vive acogida en Milán a la espera de poder volver algún día a Ucrania.