¿Y si hacemos que la próxima pandemia sea de amor? Esta es la propuesta que SoyAmante.org lanzó con motivo de la fiesta de San Valentín 2022 presentando con un video la invitación a seguir hablando sobre el amor para que este se contagie llegando a todos los rincones del mundo.
Y es que tras un largo recorrido de nueve años, la iniciativa pretende seguir favoreciendo aquellas conversaciones que nos ayudan a tomar las mejores decisiones en nuestra aspiración por construir relaciones afectivas basadas en un amor que sea para siempre.
La idea es que, a través de un mayor conocimiento sobre el amor y las reflexiones que parten de él, las relaciones románticas sean una búsqueda genuina de una unión llena de verdad y virtudes, capaz de llevarnos a la felicidad verdadera y convertirnos en auténticos amantes.
Este es el nuevo video:
Para eso, la saga de videos que ya ha superado los 100 millones de visualizaciones acumuladas en los diferentes canales de Facebook, Youtube e Instagram, tiene como eje central hacer llegar de manera visible y creativa aquellas claves que apuntan a dar respuesta a una misma pregunta: ¿cuál es el significado verdadero de la palabra “amante”?
Ser "amante" es...
Amante es alguien que es fiel. El amor se basa en una relación de respeto, lealtad y compromiso que se expresan a través del tiempo. Cuando ese amor se va reafirmando con el paso de los años, la ilusión aumenta y la novedad llega. La constancia de atravesar las diferentes etapas del amor va entrelazando una unión auténtica que se hace fuerte.
Amante es alguien que conoce el valor de la espera. El amor es paciente. Vivir momentos de espera por amor es lo que permite dar lo mejor de uno a la persona correcta y en el tiempo adecuado con libertad, abrirse a un conocimiento mutuo donde no hay límites. Existe una mayor plenitud cuando la unión con otro no es solo física sino que hay un mundo emocional y espiritual compartido, una base sólida para hacer crecer un amor más completo.
Amante no es solo alguien que está enamorado, sino que decide amar. El amor es una decisión, un acto voluntario que busca el bien de la otra persona. Después de haber resistido a los primeros impulsos del enamoramiento, la persona que sigue amando ha madurado esos sentimientos y es capaz de vivir con otro un proyecto común.
Amante es alguien que se quiere a sí mismo con una sana autoestima. El amor empieza primero por vivirlo uno mismo. Descubrir la propia belleza sin seguir estereotipos sociales o compararse con los demás, es lo que hace que uno pueda reconocer todo lo que tiene para ofrecer y lo que busca en la vida. Para amar a otro, el primer paso es amarse a uno mismo porque el amor es una donación personal.
Amante es alguien que elige amar a otro tal como es. El amor tiene como centro a la persona y la abraza con sus virtudes y a pesar de sus defectos. Es humilde y comprensivo. Elige de manera pura, sin condiciones ni tampoco midiendo lo que tiene o le falta según las circunstancias que vive. Es un tipo de amor que vence obstáculos porque en cada desafío que se presenta se revela la prevalencia clara de un “nosotros”.
Amante es alguien que demuestra amor con acciones todos los días. El amor se manifiesta en hechos simples pero concretos en la cotidianidad de la vida. Las palabras transmiten cómo podemos sentirnos, pero no siempre alcanzan. El amor verdadero es algo palpable y revela su grandeza en los pequeños gestos diarios de amabilidad y cercanía.
Amante es alguien que mira más allá de las apariencias. El amor atraviesa la capa superficial de todo aquello que es accesorio como la imagen, la capacidad intelectual, el dinero o los lujos. Para amar de verdad no se necesitan esas cosas, sino encontrar la esencia de lo que se esconde en ellas. Una mirada sincera, un rostro que deja ver el alma, una obra generosa, la fuerza interior para enfrentar las dificultades y la imaginación para recrear la rutina.
En suma, "amante es el que ama". Por eso, abracemos el amor verdadero para que este San Valentín podamos vivir como auténticos amantes renovando nuestro compromiso de volver a elegir nuestros amores con todo lo que son, llenarlos de respeto y solidez, darles el tiempo que necesitan para madurar y crecer, profundizar en sus valores, hacer el esfuerzo personal de trabajar en uno mismo para ellos y demostrar con acciones concretas cuánto nos importan.