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Menos de dos meses después de aceptar su renuncia, el papa Francisco recibió en audiencia al arzobispo Michel Aupetit, arzobispo emérito de París, el 3 de febrero de 2022, confirmó una fuente vaticana a I.MEDIA. La Croix anunció la visita del prelado francés al Vaticano a principios de semana.
Tras una serie de artículos en la prensa francesa que cuestionaban su gobierno y su vida privada, el arzobispo Aupetit decidió entregar su cargo al Papa Francisco el 26 de noviembre, dejando claro que no renunciaba, sino que simplemente dejaba la decisión sobre su futuro como arzobispo de París en manos del Papa.
Menos de una semana después, el 2 de diciembre, durante una visita a Chipre y Atenas, el Pontífice comunicaba, a través del boletín oficial de la sala de prensa vaticana, que había aceptado la dimisión del prelado parisino.
Interrogado por los periodistas unos días después durante una conferencia de prensa posterior a su viaje, Francisco explicó su decisión, afirmando que los “chismes” hacían imposible el gobierno del arzobispo Aupetit. “Por eso acepté la renuncia de Aupetit, no en el altar de la verdad, sino en el altar de la hipocresía”, dijo.
El Papa también habló – imprecisamente – sobre las acusaciones formuladas contra el arzobispo de París, hablando de una “violación del sexto mandamiento”. Dijo en ese momento que no sabía exactamente de qué se había acusado al prelado, e instó a los periodistas con los que habló a investigar la situación. Agregó que “los pecados de la carne no son el pecado más grave: los pecados más graves son los que tienen un carácter más ‘angélico’; orgullo, odio… estos son los más graves.”
