"¡Parad, hermanos y hermanas, parad! Paren, fabricantes de armas, paren”, dijo el Papa Francisco que presidió esta mañana, 2 de noviembre, la misa en el Cementerio Militar Francés de Roma.
El Papa dedicó su visita y homilía a las víctimas de las guerras con motivo de la Conmemoración de todos los fieles difuntos. El Papa lució conmovido y se le quebró la voz al recordar a “las víctimas de la guerra que se come a los hijos de la patria”.
A su llegada, el Pontífice colocó flores blancas en algunas de las tumbas y se detuvo en oración en una tumba anónima. Antes de llegar al altar, saludó a un grupo de niños y a sus familias.
Piensa en tu último paso
El Papa recordó que la vida es un camino y que ante las tumbas de un cementerio se necesita detenerse para pensar: “ Me recuerda una inscripción en la puerta de un pequeño cementerio del norte (de Italia): "Tú que pasas, piensa en tus pasos, y en tus pasos piensa en el último paso.”, afirmó.
“Tú que pasas. La vida es un viaje, todos estamos en un viaje. Todos nosotros, si queremos hacer algo en la vida, estamos en un viaje. Que no es un paseo, ni siquiera un laberinto, no, es un viaje.", ha agregado.
El consejo de un cementerio
El Papa indicó que la vida es un camino, con muchos “acontecimientos históricos, muchas situaciones difíciles”. Y detrás de los cementerios hay consejos: "Tú que estás de paso, detén tu paso y piensa en tu último paso". Todos tendremos un último paso. Algunos me dirán: "Padre, no seas tan lúgubre, no seas tan trágico". Pero es la verdad.
Lo importante es que ese último paso nos encuentre en nuestro camino, no dando vueltas; en el camino de la vida y no en un laberinto sin fin. Estar en el camino para que el último paso nos encuentre caminando.”, dijo el Papa asegurando que era un pensamiento que le venía del corazón, sin papeles en la mano.
Este es el sexto cementerio que visita el Papa en el día de la fiesta de los fieles difuntos. El año pasado ha tenido que desistir de esta tradición debido a las restricciones a causa de la pandemia. El Papa visitó en 2020, la parte inferior de la Basílica Vaticana para rezar ante las tumbas de sus predecesores.
La reflexión ante las tumbas
En su homilía, el Papa también reflexionó sobre las víctimas de las guerras y lo que pensaba delante a los sepulcros de los caídos.
El Cementerio Militar Francés rinde homenaje a los soldados que lucharon contra el régimen nazi durante la Campaña de Italia, entre noviembre de 1943 y julio de 1944.
"Estas personas son buenas. Murieron en la guerra, murieron porque fueron llamados a defender su país, a defender valores, a defender ideales... y muchas otras veces a defender situaciones políticas tristes y lamentables. Y ellos son las víctimas. Las víctimas de la guerra que se come a los hijos de la patria. Redipuglia; pienso en el Piave en 1914 - tantos quedaron allí -; pienso en la playa de Normandía: ¡cuarenta mil, en ese desembarco! Pero no importa, cayeron ...."
No es la primera visita del Papa a un cementerio militar: en 2017 visitó el americano de Nettuno y en 2014 el de Redipuglia, con motivo del centenario del estallido de la Primera Guerra Mundial.
El Papa conmovido ante la tumba sin nombre
Luego se le quebró la voz y se mostró emocionado al recordar ante la tumba de un soldado sin nombre, un hijo que no volvió al seno de su familia durante la segunda guerra mundial:
Me detuve frente a una tumba allí: "Inconnu. Mort pour la France. 1944”. No había nombre. En el corazón de Dios, está el nombre de todos nosotros, pero esta es la tragedia de la guerra. Estoy seguro de que todos los que han ido de buena voluntad llamados por la Patria a defenderla están con el Señor. Pero los que estamos en el camino, ¿luchamos con ahínco para que no haya guerras?
¿Luchamos para que las economías de los países no se fortalezcan con la industria de las armas? Hoy el sermón debería ser para mirar las tumbas. "Murió por Francia". Algunos tienen nombre, otros no. Pero estas tumbas son un mensaje de paz. "Paren hermanos y hermanas, paren". "Paren, fabricantes de armas, paren".
Así, el Papa propuso estos dos pensamientos: "Camina, piensa en tus pasos, piensa en el último paso, en paz de corazón, en paz con todos". Segundo pensamiento, estas tumbas que hablan gritan, gritan, por sí mismas, gritan la paz. Que el Señor nos ayude a sembrar y mantener estos dos pensamientos en nuestros corazones.", concluyó el Papa.
Cementerio militar francés en Roma
El cementerio militar francés está ubicado desde hace 75 años en la cima de la colina de Monte Mario, en la orilla derecha del Tíber, en Roma, en la Via dei Casali di Santo Spirito.
El Papa ha elegido el Cementerio militar francés en Roma para la celebración de la misa de difuntos el 2 de noviembre. Lo hizo para honrar la memoria de las víctimas de las guerras.
Cada 11 de noviembre, en este lugar, las autoridades de Francia e Italia recuerdan el final de la Primera Guerra Mundial.
El cementerio ha sido construido por el gobierno italiano al final de la Segunda Guerra Mundial.
La muerte de los soldados recuerda también la victoria de las tropas francesas sobre el ejército nazi que permitió a los aliados reanudar su avance y entrar victoriosamente en Roma el 4 de junio de 1944.
De hecho, el cuerpo expedicionario francés estaba compuesto principalmente por soldados del ejército africano, en particular de Marruecos y Túnez.
De los 1.888 soldados enterrados hoy en el cementerio militar francés de Roma, 1.142 son musulmanes, reconocibles por la media luna islámica grabada en cada lápida.
Entre las víctimas enterradas hay un gran número de "Goumiers", soldados de nacionalidad marroquí que fueron llamados a luchar en las tropas francesas.