El papa Francisco ha pedido abrir las puertas de los establecimientos educativos a los pobres y evitar el elitismo egoísta. Esa fue su recomendación a la Federación latinoamericana de Colegios de la Compañía de Jesús (FLACSI).
En un mensaje a través de vídeo este 10 de junio en la noche, el Papa deseó que “sean «colegios posadas», es decir, donde puedan recomponer heridas propias y ajenas; colegios de puertas abiertas reales y no sólo de discurso, donde los pobres puedan entrar y donde se pueda salir al encuentro de los pobres”.
El Papa pidió a los educadores ponerse al servicio de los últimos, pues ellos “encarnan la sabiduría evangélica, que es la óptica privilegiada desde la cual tanto podemos aprender”.
El papa Bergoglio saludó a la comunidad educativa de FLACSI en el marco de los veinte años de la Federación y les invitó para que “no se enrosquen en un elitismo egoísta, sino que aprendan a convivir con todos, donde se viva la fraternidad, sabiendo que todo está conectado”.
Asimismo, “recordando que la fraternidad no expresa -en primer lugar- un deber moral, sino más bien la identidad objetiva del género humano y de toda la creación. Esa fraternidad - indicó- corresponde a que todos “somos creados en familia, como hermanos”.
“Deseo que sus colegios enseñen a discernir, a leer los signos de los tiempos, a leer la propia vida como don para agradecer y compartir”, explicó el Papa.
El papa Bergoglio instó a mantener una “actitud crítica sobre los modelos de desarrollo, producción y consumo que empujan vertiginosamente hacia la inequidad vergonzosa que hace sufrir a la gran mayoría de la población mundial”.
Entretanto, deseó que los colegios administrados por la Compañía de Jesús “tengan conciencia y creen conciencia”.
Además, recordó el compromiso de los Colegios con el Pacto Educativo Global, y les agradeció “el servicio de promover la fe y la justicia. Sigan adelante en esta misión que les fue encomendada”, concluyó.
En sus discursos anteriores, el Papa considera la educación un motor del desarrollo integral de la persona. “Jesús es el modelo que nos enseña a relacionarnos con los demás y con la Creación. Él nos enseña a salir afuera, a encontrarse con los pequeños, con los pobres, los descartados”, sostuvo.
“La vida que se guarda termina siendo un objeto de museo con olor a naftalina, y no ayuda eso”, sostuvo.
Cabe señalar que para los jesuitas se prevé un apostolado en labores educativas. El joven Jorge Mario Bergoglio enseñó de 1964 al 1965, literatura y psicología en el Colegio de la Inmaculada Concepción en Santa Fe. Y en 1966, enseñó la misma materia en el Colegio del Salvatore en Buenos Aires.
