Paúcarcolla, Huata, Coata, Capachica y las islas de Amantani, Taquile y los Uros del lago Titicaca. Aquí un recorrido de la patrona de Puno, la Virgen de la Candelaria. Lo hizo con el acompañamiento del obispo de la Diócesis de Puno, Jorge Pedro Carrión Pavlich, quien expresó lo siguiente:
“La Virgen María lleva paz y alegría a los hombres”.
Pues así es y quedó demostrado. Según la Iglesia en Perú y la crónica de este emotivo recorrido, las familias pudieron rendirle un verdadero homenaje a su patrona.
“Protégenos madre mía, que hoy estamos siendo afectados por el mal de la pandemia, haz tu que recuperemos la paz y la alegría”, añadió el obispo en otro de los tramos del recorrido.
Fue el propio obispo quien recordó que además del padecimiento por la pandemia las familias de esas regiones también sufren la contaminación de los recursos hídricos.
Pero uno de los aspectos más pintorescos de este recorrido que sucedió a fines de mayo tiene que ver con la presencia de la Virgen por las islas del lago Titicaca, famoso por ser el cuerpo de agua navegable más alto del mundo y que se extiende por países como Bolivia y Perú.
Es ahí donde aparecen los nombres de Amantaní (la primera que visitó), Taquile y las islas flotantes de los Uros. En estos lugares incluso se dio la particularidad de traducir mensajes en quechua, mientras los propios pobladores dieron ofrendas a la patrona.
“María trae consuelo, alegría y fortaleza”, sentenció otra vez el obispo.
A continuación algunas imágenes más del recorrido: